Con pandemia igual que con Macri
La industria cayó 6,3 por ciento en 2020, la misma cifra que en 2019
@
En diciembre, la actividad industrial creció un 4,8 por ciento interanual y 2,7 por ciento en relación a noviembre. En relación a la situación pre-pandemia, registra una mejora del 1,1 por ciento. La estabilización económica del tercer trimestre y la recuperación en los últimos tres meses del 2020 permitió que la caída industrial en el año de la pandemia quedara en el 6,3 por ciento, el mismo retroceso observado por la UIA en 2019, a raíz del desastre de la economía de Mauricio Macri.
De todas formas, se trata de la tercera caída anual consecutiva, de manera que en los últimos tres años la reducción de la producción industrial acumulada es del 14,8 por ciento. En relación a 2015, la industria argentina es un 18,5 por ciento más chica y si la comparación se realiza frente al pico de 2011, la merma es del 22,8 por ciento.
“De no enfrentar fuertes aumentos del tipo de cambio ni problemas macroeconómicos, se espera una recuperación de la industria para el 2021 liderada por autos, construcción y metalmecánica. Los mayores incrementos se observarían durante el segundo trimestre del año, producto de la baja base de comparación, estabilizándose durante el segundo semestre”, proyectó la Unión Industrial Argentina (UIA) en su último informe de actividad manufacturera. Si se cumple el pronóstico que la UIA comparte con el gobierno y analistas del sector privado, la industria recuperaría en 2021 una pequeña parte de lo perdido a lo largo de 2018, 2019 y 2020.
A la hora de explicar por qué la industria viene creciendo, el informe de la UIA destaca que se trata de un contexto de recomposición de stocks luego de los meses de baja producción a causa de la pandemia y las restricciones sanitarias. También advierte que hay una recuperación focalizada en algunos sectores a partir de la reducción de consumos asociados a servicios como gastronomía, turismo, cultura y espactáculos y en cambio mayores compras de bienes para el hogar, como muebles, electrodomésticos e insumos de construcción para la refacción.
Por otro lado, la central fabril destacó el impacto positivo de los planes de financiamiento a la demanda, entre los cuales sobresale el Ahora 12, junto al efecto de la brecha cambiaria, que incide en la acumulación de stocks como “protección” frente a la expectativa de devaluación. También juega a favor de la industria las medidas de control sobre las importaciones de bienes finales.
En cambio, la situación de la demanda sigue contenida, en primer lugar a raíz del deterioro salarial, por lo cual el consumo privado acumula en tres trimestres 2020 una baja del 14,6 por ciento. Según
datos del Cifra-CTA, el promedio de los salarios reales de los trabajadores registrados en el sector privado acumula una caída del 15,4 por ciento entre noviembre de 2015 y el mismo mes de 2020. Si los salarios se comparan contra los precios mayoristas, la merma es del 23,8 por ciento. De cara al 2021, la mejora salarial no sólo es una necesidad social sino macroeconómica, sostiene el gobierno.
La UIA destaca el avance anual de sustancias y productos (6,1 por ciento) a raíz del mayor consumo de productos de limpieza y venta de agroquímicos, mientras que el mercado farmacéutico tuvo un alza del 1,4 por ciento. Alimentos y bebidas cerró con una leve caída de 0,2 por ciento, aunque con comportamientos dispares: “mientras se vio impulsado por el incremento de vinos, chocolates, lácteos para exportación, arroz, bebidas espirituosas y carnes, otros productos masivos como las infusiones, gaseosas y panificados se vieron afectados. Sin embargo, excluyendo los aceites que se vieron afectados por los conflictos sindicales ocurridos en el mes de diciembre, el sector hubiera registrado una suba del 1,5 por ciento en el acumulado del año”, dice la UIA.
En metalmecánica la caída fue del 9,3 por ciento, con todos subrubros a la baja salvo maquinaria agrícola y carrocerías y remolques. En tanto, los autos terminaron con una baja del 18,7 por ciento a pesar del fuerte repunte del último trimestre, mientras que la industria siderúrgica anotó una merma acumulada del 22,1 por ciento.
En diciembre, la actividad creció 4,8 por ciento y la UIA espera una recuperación para 2021 liderada por autos y construcción.