Caída de la Bolsa y los bonos
El efecto Petrobras tuvo eco en el mercado local
“Los tipos de cambios paralelos (MEP, CCL, blue) continúan en el sendero de la estabilización, luego del cimbronazo cambiario de septiembre-octubre”, describió el documento. Al cierre de la tercera semana de febrero, las brechas con respecto al tipo de cambio mayorista oficial se ubicaron en torno al 57-65 por ciento, mientras que a finales de octubre 2020 se encontraban entre 110150 por ciento.
Esto se debe en parte a que las expectativas devaluatorias fueron atenuándose, con medidas como la reducción de asistencias al Tesoro. Además, se sumó la recomposición del mercado de capitales, con resultados netos positivos en la colocación de bonos. De hecho, en enero, la asistencia del Banco Central al Tesoro fue nula. La financiación a través de la asistencia al Tesoro se había incrementado de manera exponencial por los gastos extraordinarios de la pandemia, dado que el resto de los mecanismos de financiamiento estaban cerrados: el financiamiento externo, cerrado desde 2018; la recaudación, desplomada y, el mercado de capitales local sin dinamismo debido al “reperfilamiento” de la deuda del ex ministro Hernán Lacunza.
La menor brecha cambiaria también permite “reducir el movimiento devaluatorio del tipo de cambio oficial”, describió el informe de la Undav. Durante noviembre-enero fue de 3,5-3,8 por ciento mensual, mientras que en los meses previos la depreciación venía siendo del 2,6-2,8 por ciento. A falta de una semana para que culmine febrero, el tipo de cambio mayorista se movió un 2,1 por ciento. Desde la Undav proyectan que cerrará el mes en torno al 2,7 por ciento.
El Gobierno busca que este año el dólar mayorista se mueva entre un 25-29 por ciento, alineándolo al objetivo de cumplir con la meta del presupuesto (del 29 por ciento interanual en 2021, 5 puntos menos que en 2020). El año pasado, la devaluación del dólar @
Las acciones de la petrolera brasileña Petrobras anotaron una caída del 21 por ciento este lunes en la Bolsa de Nueva York a raíz de la decisión del Presidente, Jair Bolsonaro, de reemplazar al CEO de la firma por un militar en retiro. Además, el presidente del país vecino dijo que “es posible bajar los precios del combustible en un 10 por ciento”. El efecto negativo llegó hasta la Bolsa porteña, en donde el índice Merval perdió un 3,2 por ciento. También jugaron en el mismo sentido nuevas bajas de los dólares financieros y una toma de ganancias del Grupo Supervielle.
Bolsonaro anunció el viernes pasado la decisión de reemplazar al CEO Roberto Castello Branco por el militar retirado Joaquim Silva e Luna. El mercado leyó la movida como una pérdida de independencia de la compañía en relación al poder político. Adicionalmente, Bolsonaro dijo que la política de combustible de la estatal estaba en función de los mercados y de grupos selectos y que debería cambiarse, como parte de un esfuerzo para bajar los precios de la gasolina y el diésel. En Wall Street, la acción de Petrobras bajó un 21 por ciento y en el terreno nacional, arrastró a una baja del 4 por ciento al índice bursátil brasileño.
No sólo la situación de Petrobras impactó a la baja en el Merval porteño, también hizo lo propio la caída de los dólares financieros, que arrancaron la semana con fuertes bajas, que se suman al retroceso de más de 7 pesos de los últimos tres días hábiles previos. Así, las brechas respecto del oficial mayorista perforan el piso del 60 por ciento.
El dólar “contado con liquidación” bajó más de dos pesos y cerró en 141,81 pesos, su menor valor del año. La brecha es la más baja desde el 23 de julio. En la misma línea, el dólar MEP bajó 3 pesos y cerró en 137,58, el mínimo valor desde el 28 de septiembre, con lo que la brecha con el oficial es del 53,8 por ciento.
Como consecuencia de las bajas en las cotizaciones de los bonos soberanos, el riesgo país subió 19 unidades hasta los 1507 puntos básicos, el nivel más alto desde septiembre.