Turnos “agilizados” en el Pirovano
“Recibimos una citación del Ministerio de Salud de la ciudad para vacunarnos en el Hospital Pirovano y cuando llegamos nos dijeron que no había dosis y que no saben cuándo va a haber”, contó a PáginaI12 Silvina Czerniecki, profesional de la salud y delegada del Centro de Salud Mental Nº 1, que junto a otros trabajadores del Centro de Salud Mental Ameghino y el Instituto de Rehabilitación Psicofísica (IREP) fueron citados al Hospital Pirovano y al Durand para recibir vacunas que nunca llegaron. Mientras el gobierno porteño enfrenta un proceso judicial por destinar dosis exclusivas a empresas de medicina prepaga, los trabajadores de la salud pública denuncian que el orden de prioridades de vacunación no se está cumpliendo.
Antes de ayer diez trabajadores del C.S.M N°1 recibieron un correo electrónico de la cartera sanitaria porteña en el que se indicaba que ya tenían asignado un turno en el Pirovano para recibir la primera dosis de Sputnik V. El turno era para ayer por la mañana, pero al llegar al vacunatorio se encontraron con que no había dosis.
Allí también tenían asignados sus turnos diez profesionales del IREP. En el Durand a otros trabajadores del Ameghino les sucedió lo mismo, aunque en ese caso las autoridades tuvieron la delicadeza de informar la falta de dosis antes de que llegaran al lugar. A ninguno de ellos se les indicó cuándo recibirían la vacuna.
Consultados por este diario, voceros del Ministerio aseguraron que sólo se trató de un desabastecimiento momentáneo y que hoy “se estarán suministrando nuevos empaques” para reagendar “las vacunaciones que debieron postergarse”. Sin embargo, en el Pirovano la explicación no fue brindada por autoridades sanitarias sino por empleados administrativos del lugar. Según contó Czerniecki, allí les dijeron que el lunes pasado el hospital recibió la orden de “agilizar” la vacunación, con la promesa de recibir nuevas dosis. Las dosis nunca llegaron y ahora los trabajadores se preguntan a quiénes les fueron asignadas las vacunas “agilizadas”, si eran ellos los que estaban primeros en la lista.
“En teoría hay un orden de prioridades del sistema de salud. Las primeras líneas se vacunaron primero para después avanzar, pero eso no se está cumpliendo”, advirtió la delegada del Centro, y calificó como “una barbaridad” la asignación de dosis para empresas de medicina prepaga. Desde la Asociación de Psicólogos de la Ciudad indicaron que las vacunas llegan a cuentagotas a ese personal específico y que incluso hay grandes hospitales, como el Moyano, donde casi toda la planta continúa sin ser vacunada. Se trata de trabajadores que, desde la llegada de la pandemia, nunca dejaron de realizar su trabajo presencial en los centros de salud.
“En los hospitales públicos los directivos mandan al ministerio una lista con los profesionales que realizamos tareas asistenciales y otra con los que atienden de forma remota. La prioridad era que se vacunaran los que trabajan presencialmente y no se está cumpliendo”, detalló la delegada. Por esta razón, los trabajadores tienen un pedido claro: que el Gobierno porteño haga público el modo en que distribuye las vacunas. Además de la Asociación de Psicólogos, la Asamblea Permanente por el Derecho a la Salud y ATE Capital pidieron que se informe en detalle el orden de asignación.