Denuncian un intento de golpe en Armenia
El primer ministro Nikol Pashinyan llamó a la calma y criticó a las Fuerzas Armadas
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El primer ministro armenio, Nikol Pashinyan, denunció ayer un intento de golpe de estado y lideró una manifestación para reafirmar su autoridad, debilitada luego del enfrentamiento del ejército de su país con Azerbaiyán en Nagorno Karabaj. Más recientemente, Pashinyan llegó a cuestionar la fiabilidad de un sistema de lanzamisiles rusos empleados durante el reciente conflicto armado, lo que alimentó la ira del ejército armenio. “A mí me ha elegido el pueblo y es el pueblo el que debe decidir sobre mi dimisión”, dijo el primer ministro frente a decenas de miles de seguidores en la capital, Yereván. Hasta el momento y varias horas después de que el Estado Mayor militar y el principal partido opositor reclamaran la salida del jefe del gobierno, no se registraba ningún movimiento de tropas en las calles. Rusia, aliada tradicional de esta exrepública soviética del Cáucaso, se declaró “preocupada” por la situación e hizo un llamado a la “calma”. Turquía, enemigo declarado de Armenia, condenó “con firmeza” la amenaza del ejército.
“Califico la declaración del Estado Mayor como un intento de golpe militar”, declaró Pashinyan en su cuenta de Facebook, convocando
Su autoridad se había debilitado luego de la guerra con Azerbaiján en Nagorno Karabaj.
a sus seguidores a la Plaza de la República ubicada en Ereván. Más tarde y ante alrededor de 20 mil simpatizantes, el primer ministro reconoció que la situación era “tensa” pero “se puede gestionar”. “El ejército debe obedecer al pueblo y a las autoridades electas”, declaró Pashinyan ante los aplausos de la multitud. “Son mis órdenes y nadie puede desobedecer”, agregó con tono decidido y megáfono en mano. Aludiendo a sus detractores, el primer ministro hizo un llamado al diálogo. “Estamos cansados de esta constante inestabilidad (...) empecemos a hablarnos”, declaró, aunque amenazó con “arrestar” a quienes vayan “más allá de las declaraciones políticas”.
A un kilómetro de ese lugar, en la Plaza de la Libertad, unos 10 mil manifestantes de la oposición exigían la renuncia de Pashinyan. Yuri Khachaturov, exjefe del Estado Mayor del ejército armenio, aseguró desde ese sitio: “¿Por qué no me uní a las protestas antes? Respondo eso de inmediato: no asistí porque me sentí un poco incómodo debido a la pasividad del ejército. Pero hoy estoy muy contento de que por fin nuestro ejército se haya despertado y haya tomado una decisión”. Los manifestantes pasaron la noche en la calle, muy cerca del Parlamento armenio, donde instalaron carpas cerca de las rejas del edificio.