La hora de los docentes
sociales y centros de salud.
Según la página de vacunación de Ciudad, se han recibido de Nación 211.900 vacunas. Son 172.600 de primera dosis y 39.300 de segunda. Fueron aplicadas 162.490, hasta el 5 de marzo, consigna. Si bien la diferencia en aplicaciones con el Monitor nacional es de unas dos mil dosis, las dudas crecen al ver 10 mil vacunas menos como recibidas, frente al monitor nacional que ayer marcaba 226.725. En esta página se destaca que el sistema de efectores privados ya aplicó más de 28 mil dosis. En tanto, salud pública lo hizo en 126.826 casos. Mientras, en River, en el microestadio de básquet, donde se vacuna al personal independiente de salud, ya hay más de 47 mil inscriptos.
Las prioridades
Las muertes de dos médicos por covid expuso la crisis. “Estaban esperando su vacuna, las que Gobierno de la Ciudad les dio a las prepagas y dejaron al personal de salud y a los adultos mayores sin vacunas. Hacen negocios con la salud de los más vulnerables”, reclama la Red de Hospitales Públicos. María Rosa Fullone, dermatóloga y médica de guardia del Hospital Fernández, no llegó a vacunarse. Tampoco Carlos Sereday, de 65 años, jefe de cirugía plástica del Hospital de Quemados.
“Nosotros queremos que se vacunen todos –señala Veiga–, pero no entendemos el orden de la vacunación en la Ciudad que prioriza al privado y no a nosotros que atendemos a la población más vulnerable, más pobre y más golpeada por la pandemia”. “Estamos preocupadísimos. No entendemos por qué no terminan con los trabajadores esenciales. Esto muestra improvisación en la Ciudad de Buenos Aires”, agrega Ortiz.
La explicación de Ciudad es que “Nación no entregó la cantidad de vacunas necesarias para el personal de salud”. Nada se dice sobre las 60 mil dosis que, en el mejor de los casos, duermen el sueño de los justos en el traslado de una jurisdicción a otra –desde Nación a CABA–, y podrían estar disponibles a la brevedad, para
Los docentes y no docentes que trabajan en escuelas públicas y privadas de la Ciudad de Buenos Aires comenzarán a ser vacunados el miércoles próximo, en forma escalonada, por etapas y “siguiendo las prioridades establecidas por el Consejo Federal de Educación”, informó el gobierno porteño. “Ante el ingreso de un nuevo lote de vacunas Sinopharm, comenzó este sábado el empadronamiento para docentes y no docente perteneciente al primer grupo de prioridad, que abarca a 40 mil personas”, detalló la Ciudad de Buenos Aires en un comunicado.
Tras aclarar que podrán recibir la primera dosis “sólo los menores de 60 años”, la Ciudad detalló que el primer grupo estará integrado por personal de dirección y gestión, supervisión e inspección, docentes frente a alumnos/as de nivel inicial (incluye ciclo maternal), nivel primario, primer ciclo terminar con personal de salud y comenzar con los docentes, mientras –como sucede en el resto de las provincias– se avanza con los mayores de 80 y 70 años.
Allí comienzan a cruzarse los planes: mientras en CABA todavía se vacuna a personal de salud, desde el 29 de diciembre, y a los mayores de 80 años a partir del 22 de febrero, el resto del país inició la vacunación a docentes, que recién ahora se anuncia en la Ciudad. El plan parece ir modificándose a medida que pasan los días, llegan más vacunas y hay más inscriptos.
Plan irregular
Al 1º de marzo, las redes del Ministerio de Salud de CABA anunciaban: “Ya vacunamos a más de 28 mil adultos mayores contra el covid-19 en la Ciudad durante la primera semana desde el comienzo de la Etapa 2”. Según la Ciudad, hay 23.100 médicos, enfermeros y auxiliares en la “primera línea” de atención a pacientes con covid-19. “Los primeros en ser vacunados son quienes se desempeñan en la primera línea”, dijo el ministro Fernán Quirós, y detalló que la primera dosis de Sputnik V sería para médicos y auxiliares de terapia intensiva y guardias, y el personal de laboratorios y ambulancias.
Sin embargo, el plan de vacunación es “improvisado” y con un “alto grado de informalidad”. No hay registros computarizados, ni asignación fehaciente de turnos. Las enfermeras, los médicos o camilleros de la primera línea “son llamados por el jefe del servicio y les dan turnos anotados a mano, si alguien no llega se lo dan a otro”, explica Ortiz. “Es injusto y desigual”, añade Veiga. En el Hospital Ramos Mejía, casi todo el plantel está vacunado, en otros, como el Moyano, reclaman por la vacunación de 800 profesionales ya que solo se han (1°, 2° y 3er grado) y de Educación Especial.
El operativo de vacunación para este primer grupo abarcará cuatro días contados desde el miércoles, para lo cual “hay disponibles 16 mil vacunas y cuatro centros de vacunación”. Los lugares de vacunación serán el Centro Islámico, situado en avenida Bullrich 55, Palermo; el club Racing, de Villa del Parque, Nogoyá 3045; la Usina del Arte, Agustín R. Caffarena 1, La Boca; y el Centro Cultural Recoleta, Junín 1930. Al momento de presentarse para la vacunación, las personas deberán tener el DNI vigente con domicilio en la Ciudad de Buenos Aires y exhibir el último recibo de haberes y confirmación del turno. Los trabajadores de la educación podrán empadronarse on line.
La Ciudad informó que luego se convocará escalonadamente a los grupos de prioridad restantes”. vacunado 200. Realizaron una protesta el miércoles pasado, como al martes lo había hecho el personal del Hospital Alvear: “Por un Plan de Vacunación Urgente para nuestro Hospital”, ya que sólo el 10 por ciento del personal fue vacunado y el resto aún no tienen turnos asignados.
Hoy en CABA se contabilizan más de 44 mil turnos asignados sobre un total de empadronados superior a 76 mil. Y funcionan 180 postas de vacunación que vacunan en la primera etapa a personal de salud, adultos mayores de 80, 70 y 60, años y personal estratégico o esencial. Luego a personas de 18 a 59 años con factores de riesgo, y luego a otros grupos estratégicos.
Al iniciar esta etapa de vacunación, el 19 de febrero, se asignaron por la web –luego del colapso y recupero del sistema– 40 mil turnos, de los 150 mil estimados para mayores de 80 años. Esto se sumó a la vacunación en salud que ya se estaba realizando. Para esta etapa, la Ciudad tenía previsto inocular a 130 mil personas: de salud pública y privada, de la seguridad social, entidades universitarias y de dependencia nacional, residencias de adultos mayores e independientes. Ya superó esa cifra, y sostienen: “La primera campaña de vacunación estuvo destinada al personal que se encuentra en la primera línea en la atención sanitaria, el cual ya recibió ambas dosis”. Las campañas siguientes serán para el resto de personal de salud, institucionalizado y no institucionalizado, definen.
El gobierno porteño planteó así a Nación un cambio en la estrategia de vacunación. Y el ministro Quirós precisó que todas las vacunas del laboratorio chino Sinopharm, que en la mayor parte de las jurisdicciones se destinan a la inmunización de docentes y no docentes, en la Ciudad ya fueron asignadas para terminar la vacunación del personal de salud. Pero en las últimas horas CABA anunció un nuevo cambio de criterio: el miércoles próximo docentes y no docentes de escuelas públicas y privadas de la Ciudad comenzarán, finalmente, a ser vacunados.
Según el Monitor Público Nacional, CABA recibió hasta ayer 226.725 dosis, de las cuales se aplicaron 164.726.