El Papa recibió el alta y volvió al Vaticano
Francisco se detuvo en la Basílica de Santa María Mayor y rezó por todos los enfermos, en particular con los que se encontró durante los días que estuvo en el hospital.
En un auto azul oscuro no muy grande, con los vidrios prácticamente negros como para mantener en total secreto la persona que viajaba dentro, el papa Francisco salió ayer del Policlínico Gemelli en dirección al Vaticano, después de haber estado internado allí más de una semana a causa de una operación al colón que le fue realizada el domingo 4 de julio.
El director de la Sala de Prensa Vaticana, Matteo Bruni, confirmó poco después que el Papa había sido dado de alta en el Policlínico Gemelli en la mañana, en torno a las 10.30hs. También aclaró que el auto en el que viajó no se dirigió directamente al Vaticano sino que, a pedido del Papa, se detuvo en la Basílica de Santa María Mayor porque el Pontífice quiso rezar unos minutos ante la Virgen Salus popoli romani, colocada en la capilla Paolina de esa Iglesia. El nombre en latín, Salus popoli romani (salud o salvación de los pueblos romanos), fue atribuido en el siglo XIX a una imagen de la virgen María con el niño Jesús de época bizantina (arte que comenzó en el imperio romano de Oriente, especialmente en su capital Bizancio, a partir del siglo IV d.C).
El Santo Padre, dijo Bruni, en su plegaria “ha agradecido por el éxito de su operación pero también rezó por todos los enfermos, en particular aquellos con los que se encontró durante los días que estuvo internado”.
Uno de los momentos que más ternura desencadenó Francisco fue cuando fue a visitar el servicio de Oncología Infantil del Gemelli y del cual el Vaticano difundió algunas fotos en las que se ve al pontífice acariciando a algunos de los chicos. Unos niños pequeños que se veía que estaban en tratamiento en ese servicio, le hicieron compañía en el balcón de su departamento de internación en el Gemelli el pasado domingo, cuando rezó el Angelus.
El Papa partió desde Santa María Mayor hacia el Vaticano poco antes de las 12hs y se instaló en su departamento de la residencia de
Santa Marta donde normalmente vive, precisó el portavoz vaticano.
No es la primera vez que el papa Francisco se detiene a rezar en Santa María Mayor cuando debe salir del Vaticano por obligaciones varias. Santa María Mayor es una de las cuatro basílicas que le corresponden al pontífice en tanto obispo de Roma. Comenzada a construir en el siglo IV d.C, pasó por varias reconstrucciones, y se fueron cambiando tanto el interior como el aspecto externo. La torre del campanario, uno de los más altos de Roma, por ejemplo, fue construida en el siglo XIV.
Santa María Mayor además, es muy visitada por turistas ya que es particularmente bella y está en el centro de la capital italiana, muy cerca por lo demás de la sede en Roma de la Embajada Argentina.
Antes de entrar a Santa Marta el Papa se bajó del auto y fue a saludar al personal de la policía que lo escoltó desde el Gemelli, pero también saludó a los soldados del ejército italiano que controlan las puertas de ingreso al Vaticano.
El papa Francisco fue operado el 4 de julio en el Policlínico Gemelli, uno de los más prestigiosos de Roma, por una “estenosis diverticular sintomática” que le costó una parte de su intestino colon. Pero al parecer siempre reaccionó positivamente. Hizo su primera aparición en público el domingo pasado para la oración del Angelus y no se descarta que lo haga el próximo domingo desde la ventana del Palacio
Apostólico que da hacia la Plaza de San Pedro, donde normalmente reza el Angelus cada domingo.
Desde que fue elegido Papa en 2013, Francisco, hoy de 84 años, no ha tenido graves problemas médicos. Es cierto que a veces se lo escucha con la respiración un poco agitada pero no hay que olvidar que hace casi 60 años le fue extraído el lóbulo superior de uno de los pulmones a causa de consecuencias de la tuberculosis. En 2019 fue operado de catarata a un ojo y últimamente ha sufrido de ciática por lo que en ciertas ocasiones se vio obligado a cancelar algunos compromisos. Pero nunca había sido internado hasta ahora. La reciente internación y operación del colon se mantuvo en secreto hasta último momento. Las primeras informaciones se tuvieron cuando el Papa llegó sorpresivamente al Gemelli, en la tarde del domingo. Ese mismo día fue operado. La cirugía, de la que participaron diez médicos, según precisó el Vaticano, duró unas tres horas y se esperó ver las reacciones del paciente para dar el primer informe que salió después de las 23.