Sueño cumplido, muchas fotos y ningún anuncio
El Presidente conversó con el empresario en una de sus fábricas de autos eléctricos y lo invitó a visitar la Argentina. El conflicto de X en Brasil y el litio, claves en el encuentro.
Secretaria General de la Presidencia, Karina Milei. Sin brindar detalles, la Casa Rosada, además, informó que ambos acordaron realizar “un gran evento en la Argentina para fomentar las ideas de la libertad”. Sería un Congreso sobre “demografía, tecnología y crecimiento económico” a desarrollar en Buenos Aires en el segundo semestre. Exultante, la canciller Mondino manifestó que el encuentro con Musk “terminó de consolidar” a Milei de “manera absolutamente inapelable como uno de los cinco líderes más importantes del planeta”. “Argentina volverá a ocupar el lugar en el mundo que merecemos”, lanzó eufórica. “Qué bueno es ver a la Argentina integrándose otra vez en el mundo”, sumó el fundador de Cambiemos, Mauricio Macri.
De paseo por la planta
Tras el intercambio, el magnate abandonó Austin y lo dejó a Milei
recorriendo la planta que produce autos eléctricos. En su agenda figuraba un compromiso en Los Ángeles que no quiso posponer. El Presidente, sin embargo, aprovechó para conocer las instalaciones y probar una camioneta de acero inoxidable: la Cybertruck. Se trata de una pickup, valuada en 100.000 dólares que, además de un diseño futurista, tiene capacidad para remolcar 6500 kilos y
acelerar de 0 a 100 km/h en solo 4 segundos. Sobre las pistas de la gigafábrica, el jefe de Estado se dio el gusto de pisar el acelerador con su hermana Karina de copilota.
La jornada, de principio a fin, fue para Milei todo un acontecimiento. “Selfie time”, escribió Milei en inglés en una de las seis publicaciones que hizo en Instagram. A la tarde ya eran más de cien en la red social X, propiedad de Musk. “Pasamos de ser un refugio de las peores dictaduras del mundo, a ser el faro del mundo libre”, rezaba uno de los tantos mensajes que compartió. De la actividad, no obstante, no se llevó nada concreto. Solamente el carrete de fotos con pulgares para arriba, el paseo en la pickup y la promesa de una visita a la Argentina. “Fue un primer acercamiento”, justificaron en el Gobierno.
Musk, por su parte, se fue de Texas con varias propuestas. Entre otras, el libertario se comprometió a interceder en la disputa político-judicial que la red social X mantiene en Brasil. Esta semana el Supremo Tribunal Federal de Justicia ordenó investigar al sudafricano por amenazar con no obedecer las disposiciones que obligan a la plataforma a bloquear cuentas de X. “Va a tener que aprender a vivir aquí”, lanzó Lula da Silva. El empresario denunció censura, pidió la renuncia de un magistrado y advirtió que podría cerrar la filial de ese país. En el gobierno argentino sueñan con que mude las oficinas a este territorio.
En la reunión de ayer, Milei también confirmó que está dispuesto a cumplir la mayor ambición del dueño de Tesla: conquistar las reservas de litio que abundan en el norte argentino. El mineral es uno de los recursos más codiciados del mundo, clave para la transición energética, y esencial para las baterías de los vehículos eléctricos que fabrica Musk. El otro gran interés del empresario nacionalizado estadounidense es el mercado de las comunicaciones. Entre todos las actividades que desreguló el mega DNU
Según Mondino, la visita “terminó de consolidar” a Milei de “manera inapelable como uno de los cinco líderes más importantes del planeta”.
de Milei, está el de los servicios de internet satelital. En febrero, el Enacom permitió el ingreso de Starlink, firma de Musk, que ya comenzó a operar. El magnate, agradecido.
Luego de la travesía por Texas, la comitiva argentina regresó a Miami y hoy viaja a Dinamarca. Con una escala previa en París, el mandatario pisará Copenhague para reunirse con la primera ministra danesa, Mette Frederiksen. El martes participará de la ceremonia de adquisición de 24 aviones cazas F16 y podría ser copiloto en uno de los vuelos de prueba. Para ser parte de la demostración aérea, Milei ya se realizó y aprobó una serie de exámenes médicos.
La gira internacional finalizará el miércoles, cuando el Presidente regrese a la Argentina, después de una semana de paseo por Estados Unidos y Europa, a miles de kilómetros, y muy alejado de la realidad del país.