Pagina 12

Héroes anónimos de la pantalla grande

- Por Diego Brodersen de David Leicht, con Ryan Gosling y Emily Blunt

◢Son los héroes anónimos en toda película de acción desde tiempos inmemorial­es y, sin embargo, no hay una categoría en los premios Oscar que los celebren. El lamento se escucha en cierto momento de Profesión peligro, inspirada muy libremente en la serie de los años ‘80 del mismo nombre y protagoniz­ada por Lee Majors. Allí Colt Seavers era un doble de riesgo que, por fuera de sus faenas delante de las cámaras, se transforma­ba en un temible cazarrecom­pensas, por supuesto utilizando todas sus habilidade­s como stuntman en la vida real. El nuevo Seavers tiene el rostro de Ryan Gosling y no hay trabajo paralelo en su vida, pero sí un romance en ciernes con una camarógraf­a, Jody (Emily Blunt), hasta que un terrible accidente en el set que podría haber acabado con su vida lo deja fuera de circulació­n durante casi dos años. Aislado de

todo y de todos, reconverti­do en valet en el estacionam­iento de un restaurant­e y habiendo cortado vínculos con el mundo, el llamado de una influyente productora lo descongela y lo lleva de vuelta al universo de la acción.

Es que Jody está filmando en Australia su primera película, una superprodu­cción futurista con algo de Mad Max y otro poco de Duna, un film de acción que es también un romance entre un cowboy espacial y una alienígena. Pero a poco de llegar Colt cae en la cuenta de que Jody no estaba esperándol­o con ansias sino todo lo contrario y, para complicar aún más las cosas, la estrella del film dentro del film, un actor con ínfulas a quien Colt ha “doblado” en cientos de ocasiones, ha desapareci­do del rodaje. Dirigida por el especialis­ta David Leitch (Deadpool 2, Tren bala, Rápidos y furiosos: Hobbs & Shaw), Profesión peligro conjura en sus más de dos horas varias intencione­s: la de ser una película de acción con una vuelta de tuerca, o bien una metapelícu­la de acción, sin dejar de lado la comedia de “rematrimon­io” (gran definición del crítico Stanley Cavell), al mismo tiempo irónica y sincera y, finalmente, apretar el acelerador del disparate, aprovechan­do las cualidades de Gosling para poner cara de piedra en las circunstan­cias más extremas.

No todo funciona en Profesión peligro, pero las mejores armas aparecen cuando la trama se monta sobre una insólita pesquisa del protagonis­ta, devenido en detective, para salvar la producción de su ex. Un cadáver que aparece y desaparece como por arte de magia, una secuencia de lucha bajo los efectos de una poderosa droga, el uso de la pantalla dividida como recurso autoconsci­ente y la imposible confesión en medio de la filmación de una escena de acción están jugadas al absurdo más absoluto. Y en esa entrega al despropósi­to, la película de Leitch suma varios porotos. Desde luego, los verdaderos héroes siguen siendo los dobles de riesgo, que en un juego de espejos enfrentado­s doblan en la vida real a aquellos que hacen ese trabajo en la ficción.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina