HOMBRES DE AUTO
Giovanni Battista Pirelli
Si hubo un hombre que sabía mucho de diseño y fabricación de neumáticos fue el ingeniero italiano Pirelli, que nació en Varenna el 27 de diciembre de 1848. Desde la niñez tuvo afición por la técnica y se dedicó al estudio con mucho esmero, recibiéndose de ingeniero industrial en 1870 en el Politécnico de Milán. Este profesional muy joven recibió las más altas calificaciones y fue nombrado como el mejor alumno de la carrera. Como premio obtuvo una beca para viajes de estudio por varios países de Europa para analizar el crecimiento de la industria continental recién formada.
En 1872 Pirelli abrió en Milán una pequeña empresa con la razón social de Pirelli & C., la primera fábrica italiana de producción de artículos de caucho. Durante sus primeros años, la empresa participó en obras de interés nacional. Cuando en 1883 surgió la primera central eléctrica Edison, se dedicó a la construcción de la red eléctrica en la península italiana; luego, estableció un acuerdo con el gobierno italiano para la construcción y tendida de cables submarinos.
Hacia finales del siglo comenzó la fabricación de neumáticos, sector que debía conducirla a nivel internacio- nal; al principio para bicicletas (1890) y luego para automóviles (1901), con su cubierta “Ercole”. En 1907 y a bordo de un Itala con cubiertas Pirelli, el príncipe Scipione Borghese y el periodista técnico Luigi Barzini triunfan en la competencia Pekín-París. En 1913, un Peugeot con neumáticos Pirelli gana el Gran Premio de Francia, con Georges Boillot como piloto. Este es el primer gran premio de la historia.
Hacia comienzos de la década de 1920 aparecen nuevos diseños y tipos de carcasas, como el Pirelli Cord. El concepto de cubierta tipo “balón” a baja presión se impone en Europa. En 1927 aparece el Pirelli Stella Bianca, primer y verdadero neumático moderno. En Italia la empresa crea la escuela del neumático de carreras. En su versión de competición este tipo de cubierta se instala en el Alfa Romeo P3 y la Maserati de 8 cilindros que vencieron en muchos grandes premios con pilotos de la jerarquía de Varzi y Nuvolari.
Giovanni Battista Pirelli falleció en Milán en 20 deoc- tubre de 1932 y se hicieron cargo de la empresa familiar sus hijos Piero y Alberto. En Milán una de las calles lleva su nombre.
En 1951 se lanzó al mercado el famoso diseño radial “Cinturato”, a la vez que la marca resulta el emblema de las más veloces máquinas de la Fórmula 1, con pilotos excepcionales como Juan Manual Fangio y Alberto Ascari, entre muchos otros. Ferrari, Alfa Romeo, Maserati y Lancia le deben mucho a Pirelli en la concreción de los numerosos triunfos y campeonatos obtenidos en dicha época.
En la década de 1960 el estudio de los materiales y de la estructura de las cubiertas desembocan en la introducción del acero en la carcasa radial para hacerlas más resistentes, desplazando a las carcasas textiles. La empresa italiana se expande cada vez más y llega a ser uno de los fabricantes de neumáticos con más prestigio en el mundo.
Un poco antes de empezar el siglo XXI, Pirelli presentó, entre muchas otras innovaciones, el sistema de producción robotizado MIRS, cuya primera producción fueron los neumáticos de altas prestaciones y, posteriormente, los tipos de cubiertas que permiten seguir rodando tras una pinchadura y con una presión cero.
“En 1872 Pirelli abrió en Milán una pequeña empresa dedicada a la producción de artículos de caucho. Al principio fabricó neumáticos para bicicletas (1890) y luego para automóviles (1901).”