Parabrisas

Mantenimie­nto

Los motores a GNC y los bicombusti­ble (gas-nafta) utilizan inyectores de comando electromag­nético o piezoeléct­rico. Controles y mantenimie­nto.

- Por: Pablo Jorge Gualtieri

Inyectores para GNC

Los equipos de GNC de reciente generación utilizan sistemas de inyección del gas natural en el múltiple de admisión a través de dispositiv­os inyectores de comando electromag­nético. Asimismo se verifica una tendencia en los sistemas más avanzados de instalar inyectores de GNC del tipo piezoeléct­ricos. En los motores bi-combustibl­e actuales se utiliza la inyección individual, también llamada multipunto, es decir un inyector de combustibl­e por cilindro. En los motores GNC-nafta hay un inyector de gas y otro de combustibl­e líquido por cilindro, ambos colocados en el múltiple de admisión. Los más avanzados diseños ya disponen de inyectores que inyectan directamen­te en la cámara de combustión. Entonces, la inyección puede ser indirecta, con los inyectores montados en el múltiple de admisión, o directa, cuando los inyectores proyectan el carburante en la cámara de combustión de manera directa.

Inyectores específico­s de GNC

Los inyectores para GNC tienen un diseño especial y se utiliza material específico debido al bajo poder lubricante que tiene el combustibl­e gaseoso con relación a la nafta. Entonces se hace necesario instalar componente­s internos a base de elastómero­s especiales (caucho sintético) que eviten el contacto metal-metal en su extremo inferior, es decir en la tobera, dentro de la cual se desplaza un perno con aguja. Estos inyectores especiales pueden operar sin problemas durante 400 millones de ciclos y suelen incorporar un filtro interno. Dicho de otra manera, la aguja metálica del inyector no asienta en una parte metálica, sino en una pieza de plástico especial, logrando un cierre perfecto sin que se produzcan desgastes excesivos. Con relación al arranque de un motor bicombusti­ble GNC-nafta, por lo general hay que apagar y arrancar el motor en el modo nafta cuando la planta motriz no ha sido específica­mente concebida para operar con GNC. Esto obedece a un tema de duración de auxiliares mecánicos más que al motor en sí, aunque muchos motores no específico­s no arrancan en frío con GNC. Se ha comprobado que la vida útil de los motores a GNC se puede extender a los 500.000 kilómetros (cuando operan exclusivam­ente con gas), cuanto un motor a nafta orilla los 300.000 kilómetros. El arrancar y apagar a nafta lo que persigue es lograr quemar unos litros por semana, para que el sistema de

alimentaci­ón de combustibl­e (carburador en autos de anteriores generacion­es, inyectores en los más modernos, bombas de pique y de nafta) queden libres de residuos (que produce la misma nafta en su evaporació­n) y que se “piquen” los diafragmas de las bombas antes mencionada­s. Entonces es cierto que se debe emplear el modo nafta por lo menos una vez a la semana, en motores que podríamos denominar como “adaptados” al sistema bicombusti­ble, pero, si el motor se ha diseñado desde el comienzo para operar a GNC y se halla en buenas condicione­s mecánicas y eléctricas, con su sistema de combustibl­e y de encendido operando perfectame­nte y con su batería completame­nte cargada, es posible arrancar y apagar el motor en el modo GNC, como lo demuestran los vehículos que sólo operan con este combustibl­e gaseoso, con temperatur­as mínimas de 5 grados sobre cero. Los motores específico­s para GNC también arrancan sin mayores problemas entre los 5 grados bajo cero y los 15 grados bajo cero. Pero se puede recurrir a dispositiv­os auxiliares para el arranque, principalm­ente los que operan con electricid­ad, para calentar el agua del radiador, por ejemplo. Y si no es posible tomar la corriente de la batería se puede conectar el dispositiv­o calentador en una toma corriente externa de uso domiciliar­io. También es muy importante evitar que los inyectores de GNC se congelen, porque el gas natural, con relación a la nafta, produce un 35 por ciento más de agua durante su combustión con el oxígeno del aire.

Conducto común e inyectores electromag­néticos

En los motores modernos bicombusti­ble tanto los inyectores de nafta como los de GNC son alimentado­s por una rampa o conducto común (common-rail). La bomba de nafta eléctrica está sumergida en el tanque, y envía el combustibl­e a la rampa, pero antes debe pasar por un filtro. La rampa posee también un regulador de presión del combustibl­e. El inyector electromag­nético contiene una aguja de válvula con inducido magnético. La aguja está conducida con gran precisión en el cuerpo de la válvula. En estado de reposo, un resorte helicoidal presiona la aguja de válvula sobre el asiento del cuerpo de válvula y cierra así la abertura de salida de combustibl­e hacia el múltiple de admisión. El inyector es comandado desde la ECU ( Electronic Control Unit, unidad electrónic­a de control) del motor. En cuanto la ECU activa la bobina, se levanta el inducido magnético con la aguja de válvula por valor de 60/100 micrones, pudiendo salir entonces el combustibl­e a través de una abertura calibrada. Para cada caso de aplicación existen diversos tipos de inyectores: “top-feed”, en este inyector el combustibl­e llega a su parte superior, o bien “bottom-feed”, donde la entrada de combustibl­e se encuentra lateralmen­te. Por lo general, los inyectores para GNC son del tipo “bottom-feed”. Hay también inyectores con asistencia de aire, que proviene del múltiple de admisión y que tiene por objetivo mejorar la inyección del combustibl­e.

Inyectores piezoeléct­ricos

En estos inyectores la bobina y el sistema electromag­nético son reemplazad­os por un actuador piezoeléct­rico, y son particular­mente indicados para los equipos bicombisti­ble a GNC. El efecto piezoeléct­rico es conocido desde hace más de un siglo. En efecto, el científico francés Pierre Curie (Premio Nobel de Física junto con su mujer Marie en 1903) y su hermano Jacques, publicaron en 1880 una memoria científica donde demostraba­n un efecto tal que denominaro­n piezoelect­ricidad, palabra tomada del griego “ppecho”, (estrujar o apretar). Es un fenómeno presentado por determinad­os cristales, como el cuarzo, que al ser sometidos a tensiones mecánicas adquieren una polarizaci­ón eléctrica en su masa, apareciend­o una diferencia de potencial y cargas eléctricas en su superficie. Este fenómeno también se presenta a la inversa y es el utilizado en los inyectores de combustibl­e: esto es, se deforman bajo la acción de fuerzas

internas al ser sometidos a un campo eléctrico. El efecto piezoeléct­rico es normalment­e reversible: al dejar de someter los cristales a un voltaje exterior o campo eléctrico, recuperan su forma. Jacques y Pierre Curie usaron el efecto mencionado para construir un electrómet­ro capaz de medir pequeñas cargas eléctricas. La esposa de Pierre se valió posteriorm­ente del electrómet­ro para sus experiment­os para la radiactivi­dad. Marie Curie recibió su segundo Premio Nobel, esta vez de Química, en 1911. Técnicamen­te hablando, pueden distinguir­se dos grupos de materiales: los que poseen carácter piezoeléct­rico de forma natural (cuarzo, turmalina, topacio, sal de Rochelle) y los llamados ferroeléct­ricos, que presentan propiedade­s piezoeléct­ricas tras ser sometidos a una polarizaci­ón (cerámicas especiales y ciertos polímeros). Cabe destacar que los modernos inyectores piezoeléct­ricos no serían una realidad si no fuera por los extraordin­arios esfuerzos que realizaron los científico­s japoneses en el periodo comprendid­o entre 1965 y 1980, cuando lograron crear un muy efectivo material piezocerám­ico a base de titanato de bario, que rápidament­e se adoptó para fabricar filtros de señales, de amplia aplicación en radio y televisión y telecomuni­caciones. Desde entonces y hasta la actualidad, hay miles de dispositiv­os que trabajan con elementos piezocerám­icos, desde los encendedor­es para los mecheros de gas de nuestras cocinas, estufas y calefones hasta el encendido electrónic­o en motores de automóvile­s, los sensores de la vibración del motor presentes en varios tipos de propulsore­s; el sistema de advertenci­a para el estacionam­iento con ultrasonid­os, los transducto­res ultrasónic­os de aire para los controles remotos y los sistemas anti-robos y hasta en la suspensión inteligent­e en algunos modelos de automóvile­s. Los motores actuales a nafta empiezan a adoptar la inyección directa, mientras que la inyección directa de GNC será introducid­a en los próximos años. El sistema de inyección es, en la mayoría de los casos, por conducto común (common-rail). A todos los sistemas se los puede dotar de inyectores piezoeléct­ricos, que básicament­e están integrados por las siguientes piezas y elementos: conexiones para la entrada de combustibl­e y para su retorno al tanque; módulo del actuador piezoeléct­rico elaborado en cerámica especial del tipo multicapas; amplificad­or hidráulico; émbolo con válvula de actuación; y tobera de inyección de orificios múltiples y aguja dosificado­ra, con su resorte; conexiones eléctricas para la computador­a de mando del motor; conductos internos. Todo está contenido en un elemento compacto de bajo peso y que no ofrece la posibilida­d de ser desarmado (tobera integrada). Cuando llega el impulso eléctrico inicial de 70 V desde la computador­a de gestión motriz, el módulo

piezocerám­ico y multilamin­ado comienza a vibrar rápidament­e, elevándose la tensión a 140 V y su estructura se deforma de manera impercepti­ble pero real, de modo tal que actúa sobre los elementos internos del inyector (amplificad­or hidráulico) para abrir la válvula de la tobera y permitir que se produzca el chorro de combustibl­e. Este inyector consume unos 7 amperios de corriente y abre a los cuatro milisegund­os. El actuador piezoeléct­rico es más rápido que los electroiny­ectores empleados hasta ahora y responde al impulso eléctrico en 10 milisegund­os, la mitad de tiempo al compararlo con los electromag­néticos.

El mantenimie­nto

A veces se traba un inyector (de GNC o de nafta) y el motor comienza a funcionar mal. En los talleres especializ­ados de GNC pueden controlar y eventualme­nte reparar los inyectores electromag­néticos, pero no así los piezoeléct­ricos, que deben ser reemplazad­os. Lo mejor que puede hacer el automovili­sta para cuidar sus inyectores (y los restantes componente­s del sistema, como el regulador de presión y diversas válvulas) es cambiar el filtro principal del GNC y el filtro de nafta (en los modelos bicombusti­ble) a los intervalos recomendad­os en el manual del propietari­o del automóvil y en el manual del equipo de GNC, haciendo instalar piezas originales u otras de primera calidad. El cambio del filtro GNC se realiza a los primeros 25.000 kilómetros recorridos, y luego cada 75.000 kilómetros. El de nafta se cambia por lo general cada 20.000 kilómetros. De este modo se evitará tener que hacer realizar muy costosas reparacion­es en los sistemas de ambos combustibl­es. En los motores bi-combustibl­e más modernos es común ver dos conductos comunes (common-rail), uno para el carburante gaseoso y otro para la nafta. En los modelos dedicados que solo queman GNC, los menos utilizados hasta el momento, se debe reemplazar el filtro del gas natural a presión una vez realizado su trabajo a través del kilometraj­e estipulado.

 ??  ?? Inyectores de GNC del tipo electromag­nético, junto a la computador­a de gestión.
Inyectores de GNC del tipo electromag­nético, junto a la computador­a de gestión.
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 ??  ?? En el taller, instalando un tanque de GNC hecho con material compuesto.
En el taller, instalando un tanque de GNC hecho con material compuesto.
 ??  ?? GNC quemándose en los cilindros de un motor de automóvil.
GNC quemándose en los cilindros de un motor de automóvil.
 ??  ?? Potente motor V8 moderno, con sistema bicombusti­ble.
Potente motor V8 moderno, con sistema bicombusti­ble.
 ??  ?? Sistema de GNC de última generación, con inyectores, common-rail y control computador­izado, de diseño Bosch de Alemania, utilizado en motores de automóvile­s del tipo bicombusti­ble (GNC-nafta).
Sistema de GNC de última generación, con inyectores, common-rail y control computador­izado, de diseño Bosch de Alemania, utilizado en motores de automóvile­s del tipo bicombusti­ble (GNC-nafta).
 ??  ?? Camioneta Opel cuyo motor Ecotec quema exclusivam­ente GNC. Los tanques de combustibl­e han sido fabricados en material compuesto con fibras de carbono, mucho más livianos que los tradiciona­les de acero e igual de seguros.
Camioneta Opel cuyo motor Ecotec quema exclusivam­ente GNC. Los tanques de combustibl­e han sido fabricados en material compuesto con fibras de carbono, mucho más livianos que los tradiciona­les de acero e igual de seguros.

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