"Soy la prueba de que lo biológico no determina el género ni la identidad"
Macarena tiene 23 años y nació con el síndrome de Morris, pero recién a los 15 se enteró de su condición. Hoy cuenta su historia por primera vez, definiéndose como intersex.
A la Marcha del Orgullo del sábado pasado, Macarena Murugarren fue sola. Todavía no encuentra en Córdoba una organización activista por la intersexualidad en los tres años que pasaron desde que empezó a reivindicar su identidad de género. Cuando tenía cuatro meses, la operaron por primera vez. Los médicos le diagnosticaron hernias inguinales a la altura de la pelvis y le quitaron tejido de su cuerpo, ya que consideraron que era riesgoso. Pero a su familia nunca le dijeron que se trataba de tejido testicular. Nació intersex, pero no lo supo hasta los 15 años, cuando consultó a un ginecólogo para saber por qué no llegaba su primera menstruación.
Al tiempo se realizó estudios con una médica que le aconsejó, para no poner en riesgo su salud, extraer sus ovarios y su útero argumentando que eran malformaciones que podían ser cancerígenas. Ningún estudio daba cuenta de esa posibilidad. Para Macarena, en ese momento, “apareció la normalización: la medicina no quiere que vos tengas adentro de tu cuerpo algo que no corresponda con el género que ellos te asignan de acuerdo con tu apariencia. Me sometí a la operación, pero los médicos nunca fueron claros con las explicaciones de los estudios, por ejemplo, el que me hicieron para saber mi grupo cromosómico. La médica siempre me remarcaba: ‘Vos sos nena, bien nena’, como para que me quedara tranquila respecto a mi identidad genérica”.
El grupo cromosómico de Macarena es XY46. En la medicina es conocido como