Plan de Provincia y Nación para frenar monopolio Clarín-Telecom en Internet
ARSAT y el Estado provincial serán jugadores mayoristas de banda ancha a una tarifa plana, que podría bajar hasta en 30% los precios finales. Además, licitarán su infraestructura para potenciar la competencia.
La Secretaría de Comunicaciones y el ARSAT activaron estrategia EPEC y el acceso web como eje de la “justicia social” del PJ. Inminente para intervenir en el negocio. Los precios que se vienen, el rol de ingreso de la Ley de Convergencia al Congreso.
Para algunos fue un acuerdo “histórico”, otros prefieren llamarlo “inédito”. Lo cierto es que el pasado 7 de marzo, la alianza que sellaron los gobiernos de la Nación y la Provincia de Córdoba tiene un poco de ambas realidades, porque marcará el inicio efectivo de la convergencia de las telecomunicaciones en la Argentina. Se trata de un convenio que tendrá impacto económico, social y hasta político.
Concretamente, el gobernador Juan Schiaretti y el ministro de Modernización de la Nación, Andrés Ibarra, firmaron el Convenio Específico de Conectividad que servirá de marco institucional al Plan Provincial de Conectividad. ¿Qué significa esto? De acuerdo a lo establecido en el convenio, ambas jurisdicciones compartirán y transportarán fibra óptica a través de 3.800 kilómetros de infraestructura: 1.900 de la Empresa Argentina de Soluciones Satelitales SA (ARSAT) y más de 1.900 que la Provincia de Córdoba ejecuta en el marco del Programa Integral de Gasoductos. Esto significa que ARSAT y el Estado de Córdoba se convertirán en proveedores mayoristas de fibra óptica en una provincia (la única del país) donde la fusionada Cablevisión/Telecom, a través de sus marcas Fibertel y Arnet, está a un paso de quedarse con el 95% de la banda ancha del mercado local, lo cual se efectivizará cuando la Comisión de Defensa de la Competencia se expida sobre la fusión. En tanto, en los próximos días ingresaría al Congreso el proyecto de Ley de Convergencia.
Ambicioso plan.
“El principal objetivo es impactar en precios”, confió a PERFIL CORDOBA el secretario de Comunicaciones y Conectividad de la Provincia, Manuel Calvo. Según pudo conocer este diario, el plan que está elaborando la administración Schiaretti, y que se presentará en los próximos días, incluye tres ejes estratégicos:
1) Presionar fuertemente a la baja los precios de acceso a Internet, ofreciendo a todos los operadores (Telefónica, Claro, cooperativas, operadores privados menores) que quieran alquilar su infraestructura, una tarifa plana que podría llegar a ser inferior a la que acaba de bajar la propia ARSAT. En efecto, el jueves último, la empresa nacional fijó su servicio de Internet mayorista en US$14 por mega (estaba en US$18). “Podemos poner a disposición esa fibra de propiedad de la Provincia (que tiene 48 pelos y por ende, con disponibilidad de transporte) a través de una licitación pública”, explicó Calvo.
Al intervenir en el mercado mayorista con esos precios (cuyo rumbo trazó definitivamente la ARSAT), la Provincia podría motivar una baja de entre el 10% y el 30% en los precios finales de acceso a Internet; reducción ésta que en cada operador de milla final variará según sea el monto de infraestructura que deba amortizar y el volumen de clientes que tenga. “Lo que vamos a provocar es un fuerte desarrollo de los privados”, enfatizó el ministro Ibarra en diálogo con PERFIL CÓRDOBA.
2) Un segundo eje estratégico que evalúa el Estado provincial es su participación como operador comercial o “de última milla”. Esto implicaría entrar “con todo” al negocio. “No está descartado, lo estamos evaluando”, admitió el ministro Calvo, al tiempo que reconoció un hecho contundente: en 30 localidades del interior ya están haciendo cableado domiciliario, aprovechando la infraestructura que desarrolla Ecogas; próximamente “se agregarán otras 40 localidades más”, anticipó.
Aun cuando la Provincia no se largue a ser operador final de servicios convergentes, lo cierto es que será la propietaria de una de las redes con mayor penetración en todo el territorio provincial y ello la convierte en un jugador mayorista atractivo, con fuerza negociadora.
La gran incógnita es cuánto despliegue buscará la Provincia en la Ciudad de Córdoba, un mercado significativo para Clarin-Telecom. “Nada está descartado” insistió Calvo ante la pregunta puntual en este sentido y aclaró sugestivamente: “Acá también ya están los tendidos de EPEC”, que en definitiva son de propiedad de la Provincia y podrían integrarse al Plan Provincial de Conectividad.
3) El tercer eje estratégico tiene que ver con la asequibilidad del servicio. El objetivo es llevar conectividad a todos los puntos de la provincia y a todos los segmentos sociales, como una plataforma básica para generar oportunidades. Lo dijo el gobernador, desde su percepción ideológica: “La conectividad es la nueva forma de generar justicia social”. Un punto interesante en este sentido que anticipó el ministro Ibarra es que “en los lugares de la provincia donde no se pueda llegar con cableado (fibra óptica), los satélites de ARSAT serán el canal para conectar a la población”. Este es otro aspecto de coincidencia al que arribaron con la Provincia. Las escuelas, los hospitales, las dependencias administrativas, de justicia y seguridad serán la prioridad.
Más allá de una ley.
Muchos
observadores y analistas de la industria auditaban de cerca los pasos de Mauricio Macri en relación a una nueva Ley de Telecomunicaciones, para entender hasta qué punto su gobierno estaba dispuesto a ceder ante el poder que habilitó la fusión Clarín-Telecom. “Lo que hay que mirar es esto: dónde se están generando las infraestructuras para bajar precios de acceso y las resoluciones cortas que se están dictando”, explicaba a PERFIL CORDOBA una fuente nacional. “En unos seis meses recién habrá ley nacional, cuando Defensa de la Competencia se expida sobre la fusión; pero para entonces, mucho del funcionamiento del mercado ya estará definido”, explicaba esta fuente.
¿A qué se refiere? Centralmente, a cinco medidas:
1- Desde el 1 de enero de este año, Telefónica y Claro pueden brindar “cuádruple play” –telefonía fija y móvil, Internet y televisión– en aquellas localidades que cuenten con más de 80.000 habitantes y cuyo servicio no sea prestado por cooperativas o Pymes. En principio, las telefónicas tenían “permiso” sólo para CABA, Rosario y Córdoba, pero esta autorización se amplió a todo el país. A partir del 1 de enero de 2019, todos los operadores podrán dar servicios en cualquier localidad, tengan más o menos de 80.000 habitantes.
2- Como Telefónica y Claro no tienen el nivel de tendido que logran Cablevisión y Telecom fusionadas, se avanza en convenios como los firmados en Córdoba; pero también se obligará a la fusionada a compartir infraestructura. Además, en las obras o empresas donde el Estado nacional tenga decisión mayoritaria deberá garantizar a los operadores de telecomunicaciones el acceso a las llamadas “infraestructuras pasivas” (como son los gasoductos, por ejemplo) para el despliegue de redes.
3- En los próximos días, el Gobierno nacional firmaría el DNU para que las telefónicas puedan dar servicios de TV satelital. En este segmento, ARSAT pondrá a disposición su infraestructura para alquilar servicios.
4- La fusionada tendrá que devolver 80 MHz de espectro por superar el límite de 140 MHz establecido. Se abre una ventana de dos años para negociar esa devolución, período que las telefónicas consideran “una concesión” por lo que podrían también acortarse los plazos.
5- Finalmente, se habilitó la provisión del servicio básico telefónico mediante el uso del espectro radioeléctrico atribuido para la prestación de servicios móviles en tecnología 4G. De esta forma, la telefonía fija podrá ser provista por la infraestructura móvil.n