Carteles eficaces
La trama de la película Tres anuncios por un crimen de Martin McDonagh describe la estrategia que adopta una mujer (Frances McDormand) para tratar de conseguir que la policía investigue el asesinato de su hija y pueda lograr la captura del criminal. Para eso coloca tres carteles en una ruta cercana al pueblo donde vive señalando la inacción policial.
La idea de que una mujer coloque anuncios con un objetivo no es nueva. Ya había sido adoptada en 1954 para la película de George Cukor La rubia fenómeno. Al comienzo del film la protagonista, una joven llamada Gladys Glover, se relaciona con un realizador de documentales que en el Central Park de Nueva York la filma mientras ella les está dando maíz a las palomas. Se sabe así que esa chica había trabajado en una fábrica de zapatos y como modelo de ropa interior y que había perdido su último trabajo porque sus caderas medían más de lo indicado. Ese mismo día, en un paseo por Columbus Circle, detecta que se alquila un espacio para un anuncio y decide alquilarlo por tres meses para colocar allí su nombre. La fábrica del jabón Adams, que tradicionalmente alquilaba ese espacio, trata de persuadir a Gladys para que se lo ceda, pero ella solo lo hace a cambio de que le financien la publicación de otros seis carteles en Nueva York con su nombre. La estrategia de la joven ignota logra su objetivo y cuando va a la tienda Macy’s y alguien oye pronunciar su nombre la clientela se abalanza sobre ella para pedir un autógrafo a la ahora “famosa” Gladys Glover. Su insólita historia llama la atención de la prensa y la entrevistan en televisión y le ofrecen, además, un contrato para publicitar el jabón Adams y realizar una gira para dar conferencias sobre las bondades del producto. Dentro de esa atención mediática en la que ella alega que publicó los carteles solo “para hacerse de un nombre”, advierte que su inesperada popularidad y la atención pública hacia ella en realidad se basan en que es considerada por la gente como una curiosidad y no en sus propios méritos, y eso finalmente le produce cierta frustración. En ese contexto, su amigo documentalista, mientras está filmando desde una jaula un corto sobre la reacción del público cuando observa los animales en el parque zoológico, se reencuentra con la joven que conoció en el parque al ver en el cielo un avión que escribe con humo blanco “Pete, por favor, llama a Gladys”.
La rubia fenómeno tuvo grandes actuaciones: la de la protagonista, encarnada por Judy Holliday, y la de Jack Lemmon como el documentalista, que allí marcó su debut en el cine. Es una película que destaca el poder de la publicidad y la desesperada ansiedad de la gente por hacerse famosa.n