EJEMPLOS
El mundial de fútbol acapara espacios, titulares, comentarios de triunfos y caídas, éxitos y fracasos deportivos. Pero no menciona enseñanzas importantes. Alemania, último campeón, perdió con estrépito, pero jerarquizó su conducta acatando en el campo de juego, sin protestas ni gestos airados, un polémico gol decisivo en su contra, que prácticamente la condenaba a su eliminación, convalidado con el VAR tras su primera anulación.
El capitán se acercó respetuosamente al juez solo para preguntar el tiempo que restaba, en tanto titulares de la prensa alemana señalaban que su selección obtenía los resultados que merecía. También impactó la imagen de japoneses y senegaleses limpiando tras el partido el sector de plateas donde se alojaran. En tanto, en nuestro país se festejaba por TV un gol tramposo de
Maradona a los ingleses logrado con la mano en el Mundial del 86 por los cuartos de final; o se veía a hinchas mofándose de mujeres rusas, viveza criolla de por medio, con palabras soeces.
El prestigio de un país trasciende, se sustenta y consolida con conductas sociales probas, más que con puntuales conquistas deportivas.
Carlos Augusto Bottino carlosbottino @fibertel.com.ar