Cuba va a eliminar la palabra ‘comunismo’ de su nueva Constitución
atraviesa el país y que podría agravarse si aumenta la inestabilidad en Venezuela, su principal socio.
En su artículo 68, el proyecto define el matrimonio como la unión concertada “entre dos personas y no dice de qué sexo”, explicó Acosta. La actual Carta Magna limita el matrimonio a “la unión voluntaria concertada de un hombre y una mujer con aptitud legal para ello”.
“Es un acto de justicia que refuerza esos principios de humanismo, de equidad, y que busca evitar esa discriminación que por distintas razones y durante mucho tiempo se ha padecido”, añadió Acosta, para quien la nueva Constitución “no podía eludir este asunto”.
Sin embargo, Acosta dejó claro que el cambio de concepto no supone automáticamente la legalización “del matrimonio igualitario”, asunto que “requiere un desarrollo legislativo posterior” para que “en el futuro eso se pueda incorporar”.
El proyecto, de 224 artículos y elaborado por una comisión parlamentaria que dirigieron Raúl Castro y el presidente Miguel Díaz-Canel, será votado por los más de 600 diputados de la Asamblea Nacional hasta el lunes, y luego sometido a un referéndum popular antes de su aprobación final. Pese a la simpatía mutua que exhiben Evo Morales y el papa Francisco cada vez que se encuentran –la última fue en el Vaticano, en junio–, la Iglesia boliviana insiste en rechazar la intención del mandatario de forzar la Constitución para poder aspirar a un cuarto mandato en las elecciones de 2019. “Si el pueblo en un referéndum, promovido por el gobierno, dijo ‘no’ (a la repostulación de Morales), si se escucha al pueblo, hay que aceptar esa decisión, sin buscar triquiñuelas para ver si se puede deshacer esa decisión”, dijo el viernes el influyente obispo de Sucre, Jesús Juárez.
Pese al resultado del referéndum, en noviembre de 2017 el Tribunal Constitucional, controlado por el oficialismo, autorizó una nueva candidatura de Morales para 2019, invocando el respeto a sus derechos humanos por estar supuestamente “prescrito”. La decisión del Tribunal viola la Constitución de 2009 –reformada por el propio mandatario–, ya que impide su reelección.
“Lo que se está pidiendo es que se cumpla la Constitución Política del Estado”, dijo Juárez, considerado un “peso pesado” entre los obispos bolivianos. Sus palabras están en línea con la posición de la Conferencia Episcopal de Bolivia, que sostuvo en 2017 que el cuestionado fallo del Tribunal “abre el camino al totalitarismo y al dominio del más fuerte”, lo
Tras las críticas de Juárez, el ministro de Defensa, Javier Zavaleta, respondió: “Si ese monseñor ha dicho eso, lo que tiene que hacer es dejar la sotana y ponerse el traje de político. Lo vamos a recibir como político y vamos a discutir como políticos”.
“Ha quedado claro dentro de la Iglesia católica que hay dos vertientes de pensamiento: los que siguen viviendo como hace 200 o 300 años y creen que Bolivia no ha evolucionado en términos culturales y políticos, y hay los sacerdotes de avanzada que saben que ya no hay monopolio de la Iglesia sobre asuntos políticos”, agregó Zavaleta.
Por su parte, el ministro de Desarrollo Productivo, Eugenio Rojas, aymara como Morales, afirmó que “los curas quechuas y aymaras, que han nacido en Bolivia, están de acuerdo con el presidente”.
Desde el gobierno también destacaron que el flamante cardenal Toribio Ticona, nombrado purpurado por el papa Francisco en junio, apoya a Evo Morales.