Las tasas se disparan al 120% y se expande el consumo ‘multitarjeta’
Consumir en cuotas es cada vez más caro por las altas tasas que mantiene el Banco Central para contener la inflación, con tasas en el orden del 60%. Algo similar ocurre con las tasas de los préstamos personales.
El costo financiero total, el porcentaje que se paga para comprar en cuotas, varía del 70% al 120% en los sitios de retail, de las cadenas de electrodomésticos a Mercado Libre.
En ese contexto, sin embargo, según los analistas financieros se identifica un cambio en los hábitos de consumo de la gente para ajustar sus presupuestos a la corrida cambiaria y su impacto en los precios.
“La suba de tasas y la volatilidad cambiaria hizo que varias entidades encarecieran sus líneas de créditos personales. Si bien la tasas parten de un 40/45% la clave de la operatoria es el Costo Financiero Total que alcanza niveles del 80%”, explicó Guillermo Barbero, Socio de First Capital Group.
Las tarjetas de crédito experimentaron en el mes una caída significativa en julio respecto al mes anterior -28,82%, ubicándose en los niveles más bajos del año, y a pesar de la cantidad de consumidores que se trasladaron hacia Rusia, adelantando sus vacaciones de invierno.
“La variación de la tasa pasiva no repercute tanto sobre el consumo porque influyen otros factores que son los gastos de administración o la logística de otorgar un crédito de consumo”, indicó para explicar por qué las tasas llegan hasta un 120%.
“En préstamos a empresas o adelantos en cuenta corriente la suba es mucho más alta”, agregó Barbero. “Seguramente tendríamos que ir a 2002 o 2003 para encontrar tasas similares”.
Según datos publicados por el Banco Central, se identifica un aumento sostenido en la cantidad de tarjetas de crédito en el país durante el último año. Actualmente, se calcula que ya circulan más de 40 millones de plásticos entre entidades públicas y privadas, cerca de tres millones más que en el mismo período que el año anterior.
“Las tarjetas de crédito son vistas como un instrumento financiero que permite vencer los avances de la economía. Simplemente con pensar que los usuarios pueden financiar en cuotas sus consumos o acceder a descuentos bancarios mientras suman puntos o millas de viaje las hace parecer perfectas”, remarcó Rodrigo Nadal, director de Resolvé tu deuda. “Pero el problema principal se encuentra en la falta de educación financiera y el desconocimiento general sobre las condiciones de financiación, lo que hace que las personas cometan el error de comenzar a pagar solo el mínimo de la tarjeta”, agregó.
Para Barbero, esto se da porque los bancos pusieron un techo al límite de crédito de la tarjeta. Entonces, si la gente quiere mantener el nivel de consumo de la tarjeta saca otra tarjeta. Si no aumentan los límites de crédito, que es lo que pasó en general este año, lo que hay que hacer es sacar una tarjeta en otro banco.
“La tasa de la tarjeta de crédito, si se acomoda la tasa pasiva, va a tener que bajar hacia fin de año. Pero siempre va a haber casos de algunos créditos de consumo más caros”, anticipó el analista de First.