Mientras se debatía el aborto, subió de precio el misoprostol
La devaluación empujó el costo dolarizado en las clínicas clandestinas y aumentó el medicamento que interrumpe el embarazo. Correlación de inequidad y aborto ilegal.
Después del rechazo a la legalización del aborto en el Senado de la Nación por 38 votos contra 31, los costos de la clandestinidad volvieron a aumentar, mientras que los ingresos de las mujeres se mantienen con aumentos por debajo de la inflación.
Del otro lado, los números del World Economic Forum muestran que entre los diez países con mejor distribución de riqueza se encuentran países con aborto legal.
En el último mes, el precio en farmacias del misoprostol –que se comercializa en la Argentina bajo un solo laboratorio, Beta– aumentó de los $ 3.200 que salía en junio, cuando la ley tuvo media sanción en diputados, a $ 3.427 hoy. Y un aborto clandestino en una clínica mantiene sus costos dolarizados, que llegan a los US$ 1.000. Con el salto del dólar del viernes, son casi $ 30 mil.
El miércoles pasado, mientras se discutía el proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo, en el Ministerio de Trabajo también se reunía el Consejo del Salario, que determinó una suba del 25% en cuatro cuotas, que termina llevando el salario mínimo vital y móvil a los $ 12.500 en junio del año próximo, lejos de los $ 19 mil que pretendía la CGT. En ese contexto, a la brecha de ingreso general del 27% se suma que casi la mitad de las trabajadoras (45 %) no tenía ingresos incluso por debajo del salario mínimo el año pasado. La llamada “feminización de la pobreza” impacta en el acceso a la salud bajo métodos seguros cuando no están incluidos en los planes médicos obligatorios o cubiertos por el sistema de salud pública.
“Las inequidades de ingreso impactan en el crecimiento económico porque se convierten en inequidades de salud, educación, participación en el mercado laboral y exclusión social, además de afectar las capacidades de las futuras generaciones”, escribe Audrey Verdier-Chouchane en un ensayo sobre el desarrollo inclusivo de las mujeres. “Mejorar el estatus de la salud mejora el acceso de las mujeres en la economía”, agrega.
En un artículo de la profesora de Economía de la Salud en la Universidad de York, que fue publicado por el WEF, se analiza que si bien las muertes por desórdenes de nutrición y enfermedades perinatales bajaron un 20% en los últimos 15 años, todavía hay países –sobre todo en el mundo en desarrollo, donde se ubica la Argentina– donde los problemas vinculados al embarazo –lo que incluye los abortos ilegales– son responsables del 60% de las muertes maternas.