El sospechoso por el abuso de una nena confesó a la Policía el ataque
cuatro cuadras del terreno baldío donde se produjo el ataque.
El joven, de 21 años, fue detenido este viernes a última hora. Fuentes policiales confirmaron que confesó ser el autor del ataque ante los efectivos y que le detectaron una “mordedura en una de sus manos”, tal como había señalado la víctima. Luego allanaron su casa en la localidad de Marcos Paz y hallaron un par de botas de goma blancas, una campera de color negro con capucha y un pantalón gris. “Todo ello utilizado por el aprehendido al momento de cometer el hecho”, se detalló.
Los investigadores de la Policía Bonaerense habían determinado que el atacante trabajaba en un frigorífico de la zona, por las botas blancas que pudieron observar en las imágenes de la cámara de seguridad que registró el momento previo al abuso. “Después de violarla le dijo que no tuviera miedo, que era una lección por andar de noche y que lo había mandado Dios”, y que “si no era él hubiese sido otro, que la podría haber matado”, señaló la madre de la niña a los medios.
Ocurrió el sábado 4 de agosto a las 5 de la mañana, cerca de la intersección de las calles Monteagudo y Buenos Aires, lugar en el que el agresor capturó a la menor para violarla a pocos metros en un descampado. El video de una cámara de seguridad de un supermercado, que difundió la fiscalía, registró el momento en el que la chica fue acorralada. En las imágenes se ve cómo el agresor la persigue hasta arrinconarla contra una pared y, a pesar de que la menor trató de correr, el delincuente la atrapa, la toma del brazo y la lleva por la fuerza hasta el descampado que hay enfrente.
Tras el ataque, dos mujeres que circulaban por la zona encontraron a la niña y dieron aviso a la policía. La menor fue asistida primero en el Hospital Municipal y derivada después a General Rodríguez.