Lava Juez, el caso de corrupción que sacude a Perú
Casi en simultáneo al tema de los cuadernos, nació en Lima una megacausa de corrupción a partir de escuchas telefónicas. En ambas investigaciones hay coincidencias y personajes con mucho poder que ya fueron detenidos.
Son más de mil escuchas que contienen declaraciones en primera persona de jueces supremos que representan la máxima autoridad del Poder Judicial en el Perú, y cuyo contenido va desde conversaciones para liberar al violador de una niña, negociaciones con congresistas, y pedidos para que no avancen causas que involucran a los más altos referentes políticos del país, similar a lo denunciado recientemente por el ex juez federal Norberto Oyarbide en Argentina. Como si todo esto fuese poco, existe también un intercambio de entradas y pases vip para el Mundial justo cuando pesaba sobre el presidente de la Federación de Fútbol un pedido de prisión preventiva por la supuesta responsabilidad como autor intelectual en el asesinato de dos dirigentes sindicales de la empresa azucarera que administraba.
Apoyo presidencial. El repudio y la repugnancia de gran parte de la sociedad al escuchar en boca de los corruptos lo que muchos suponían sin pruebas, ocasionó marchas en varios puntos del país. Fue el propio presidente de la República, Martín Vizcarra quien dio total respaldo a las movilizaciones.
Los audios llegaron a la redacción de IDL reporteros, un portal web sin fines de lucro que trabaja desde hace varios años en las causas más importantes de corrupción, incluyendo las conexiones locales del Lava Jato. Su director, Gustavo Gorriti, está convencido de que tanto Argentina como Perú atraviesan “investigaciones estremecedoras” y que de acuerdo a cómo se manejen se verán los éxitos o fracasos de las mismas.
Una fuente anónima entregó los más de mil audios a la redacción. Estaban completos, sin rótulos, referencia, ni clasificación, por lo que el trabajo fue extremadamente complejo en la identificación de las voces. Al igual que en la investigación de los cuadernos en Argentina, la inquietud profesional estaba dada en la necesidad de avanzar rápidamente sin que se filtre el material.
Empresarios y futbolistas. En un primer momento pensaron en buscar colaboradores, pero finalmente y luego de una meditada decisión, avanzaron ellos mismos en la identificación de los personajes. Poco a poco fueron apareciendo jueces, fiscales, integrantes del Consejo Nacional de la Magistratura, Congresistas de la República, empresarios, narcotraficantes y hasta estrellas del fútbol nacional que pedían favores a cambio de unos “verdecitos”, tal cual denominaban a los dólares en las escuchas.
Los diálogos arrojaban mucho más que conversaciones sobre supuestos delitos de corrupción y tráfico de influencias. En ellas se descubrieron los códigos lingüísticos propios de una mafia en la que se llamaban “hermanito”.
“¿Qué es lo que quiere, que le baje la pena o que lo declare inocente?” preguntaba el juez supremo Hinostroza Pariachi uno de los más involucrados en los audios, cuando se refería a un acusado de violar a una menor de edad que había sido condenado a 30 años de prisión por este hecho. El audio sigue con una declaración más nauseabunda “¿Cuántos años tiene, diez años, 11 añitos? ¿Pero está desflorada?”. Tiempo después la Segunda Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema, integrada por los jueces César Hinostroza Pariachi, Ventura Cueva, Pacheco Huancas, Cevallos Vega y Cávez Mella ordenaron su inmediata liberación y borrar los antecedentes policiales y judiciales generados durante el proceso del condenado.
Muchos hubiesen pensado por lógica que Hinostroza quien aparece en varios de estos audios sería sancionado, pero no fue así, o al menos no del todo.
Si bien fue