EL CELESTE NO SE DEVALUA
EL 1-1 HACE SUBIR A BELGRANO EN LAS PIZARRAS DE LOS PROMEDIOS. BUEN EMPATE ANTE DEFENSA Y JUSTICIA.
Belgrano suma y sigue. Sin jugar bien. Como le va saliendo. Cuesta descifrar la identidad del equipo de Lucas Bernardi, que más que una línea de juego parece decidido a respetar la consigna “paso a paso”, acomodándose lo mejor que puede a los desafíos que le va marcando el fixture. Así viene siendo desde el inicio de la Superliga, y el partido de ayer no fue la excepción.
Sabedor de que Defensa y Justicia iba a salir a buscarlo, la “B” decidió esperarlo con un medio campo sólido y combativo, y apostó al contragolpe como principal arma para levantar el asedio. La fórmula le dio resultado más temprano que tarde. Cuando se jugaban 5 minutos, y luego de que Nicolás Fernández desaprovechara la primera gran chance ofensiva del Halcón, Juan Brunetta capitalizó un largo pelotazo que agarró a contramano al fondo local y con un par de movimientos resolvió la jugada y estableció el sorpresivo 1-0. Acusó recibo el elenco de Sebastián Beccacece, pero hasta ahí nomás. Porque a su iniciativa le faltó intensidad y decisión, y eso terminó jugando a favor del Pirata, más allá de su tendencia a jugar el partido cada vez más atrás.
Las mejores acciones llegaron en el complemento, cuando Defensa y Justicia se hizo cargo de su condición de local y de la necesidad de revertir la adversidad. El conjunto bonaerense se adueñó de la pelota a partir de los buenos desempeños de Domingo Blanco y Gastón Togni, y empezó a inquietar un poco más a la “B”. Le costó llegar con claridad a los dominios de César Rigamonti, pero un tiro de media distancia –con la complicidad de una defensa estática y de una floja respuesta del arquero– le permitieron al paraguayo Matías Rojas igualar el marcador a los 13 minutos. La última media hora de juego se repartió entre los avances sin demasiadas luces de Defensa y Justicia y algún esporádico contragolpe de Belgrano. Las incidencias del partido le dieron a Rigamonti la chance de una reivindicación, y al Pirata dos posibilidades concretas para quedarse con la victoria, una de Matías Suárez y otra de Adrián Balboa. Por entonces, Belgrano ya no tenía a Brunetta, su hombre más lúcido en ofensiva, quien estuvo flojo de compañía y lo pagó con un excesivo desgaste.
¿Le sirve a Belgrano este empate, el cuarto que logra en cuatro fechas del campeonato? “A nosotros nos sirve sumar todos los partidos. Es el objetivo con el que arrancamos el torneo y que tenemos que mantener al menos hasta que podamos empezar a pensar en pelear por cosas más importantes, como clasificar a una Copa”, destacó Rigamonti al término del juego. “Sabíamos que iba a ser un partido difícil, pero así y todo tuvimos un par de ocasiones para poder ganarlo. No pudo ser, pero el empate es valioso”, destacó el cuidapalos, quien relativizó la jugada del gol contrario. “Son cosas que suceden. A veces a uno le toca atajar todo y en otras ocasiones te pasa que te hacen un gol que nunca te imaginabas recibir”, enfatizó. Punto y aparte.