Mejora la salud de Jair Bolsonaro, pero todavía sigue en terapia intensiva
El estado de salud del ultraderechista Jair Bolsonaro, líder en los sondeos para las elecciones presidenciales de octubre en Brasil evolucionaba ayer favorablemente, tras ser acuchillado el jueves en un acto en Minas Gerais. Según informaron sus médicos, aún permanece en una unidad de cuidados intensivos.
El polémico candidato “se mantiene consciente y en buenas condiciones clínicas”, aseguró en un comunicado el Hospital Albert Einstein de San Pablo, donde fue trasladado el viernes tras ser sometido un día antes a una delicada cirugía. El centro médico indicó que el diputado permanece en una unidad de cuidados intensivos pero que no tuvo ninguna complicación en las últimas 24 horas; que sus condiciones pulmonar y cardiovascular son buenas y que no presentó fiebre ni ningún síntoma de infección. Todos los exámenes de laboratorio y de imagen mostraron resultados estables.
Por primera vez desde el ataque, Bolsonaro dejó la cama y pudo sentarse. Su hijo Flavio subió una imagen suya a las redes sociales, al tiempo que informó que su padre comenzó a hacer fisioterapia. Una cuchillada en el abdomen le había provocado el jueves una grave hemorragia, tres heridas en el intestino delgado y una lesión en el colon.
Bolsonaro es defensor de la última dictadura militar. Además, pronunció declaraciones machistas, racistas y homófobas, por las que la Justicia lo investiga por discriminación e incitación a la violencia.