Washington conspiró con militares de Venezuela para derrocar a Maduro
Funcionarios de la administración Trump se reunieron secretamente con militares venezolanos para discutir el derrocamiento del presidente Nicolás Maduro, pero finalmente decidieron no actuar, reportó ayer el
en una información explosiva que no fue desmentida ni ratificada por las autoridades.
El diario informó que los planes de golpe de Estado se estancaron, citando a funcionarios estadounidenses anónimos y a un ex comandante militar venezolano que participó en las conversaciones secretas. La Casa Blanca, en tanto, se negó a proporcionar respuestas cuando se le preguntó sobre las conversaciones, pero enfatizó en la necesidad de “dialogar con todos los venezolanos que demuestren un deseo de democracia”.
Después de que drones cargados de explosivos estallaron cerca de Maduro en un acto el 4 de agosto en Caracas, el mandatario culpó de ello a Estados Unidos, Colombia y a sus enemigos domésticos. En aquel entonces, el consejero de seguridad nacional de Estados Unidos, John Bolton, insistió en que “no hubo participación del gobierno de los Estados Unidos”.
Además, el Departamento de Estado condenó la “violencia política”, pero también denunció detenciones arbitrarias y confesiones forzadas de sospechosos por parte del gobierno de Venezuela. En agosto de 2017, los medios informaron que Trump preguntó a sus principales asesores sobre el potencial de una eventual invasión estadounidense a Venezuela. En la misma época, dijo públicamente que no descartaría una “opción militar” para terminar con el caos en el país sudamericano.
El colapso de la economía de Venezuela bajo el gobierno de Maduro llevó al país a una grave escasez de alimentos y medicinas.
La teoría de que la administración de Trump haya considerado respaldar un intento de golpe de Estado recuerda la larga historia de intervenciones secretas de Estados Unidos en América Latina.Mari Carmen Aponte, una de las principales diplomáticas de Estados Unidos para asuntos latinoamericanos en la administración del presidente Barack Obama, dijo que “esto va a aterrizar como una bomba” en la región.
El presidente del opositor Parlamento de Venezuela, Omar Barboza, pidió ayer a Francisco interceder por la liberación de “presos políticos” y el “restablecimiento de la democracia” en el país petrolero, durante una reunión privada en el Vaticano.
Barboza presentó al Sumo Pontífice una lista de 349 opositores encarcelados, incluido el diputado Juan Requesens, detenido hace un mes acusado de supuesta complicidad en un atentado con explosivos contra el presidente Nicolás Maduro. “Le transmitió a Su Santidad la esperanza de que la Iglesia Católica pueda impulsar, junto con la comunidad internacional, el restablecimiento de la democracia y de los derechos ciudadanos en nuestro país”, informó la oposición en un comunicado.
Todas las decisiones del Parlamento, controlado por el antichavismo, son desconocidas por Maduro.