Sin facultades para un DNU
El abogado laboralista, Julián de Diego, advirtió que el Gobierno “no cuenta con las atribuciones” para sacar un decreto y obligar a las empresas a pagar un bono de $ 5 mil a los trabajadores del sector privado. El letrado explicó a PERFIL que “el Poder Ejecutivo no tiene atribuciones para fijar el bono como obligatorio, porque no cuenta con la ley de Emergencia Económica que tenía el gobierno de Kirchner, por lo tanto no posee facultades de imponerle (a la empresa) que pague $ 5 mil a nadie”. Para el abogado de la UIA, Daniel Funes de Rioja, el decreto “lo convertirá en obligatorio para todo el sector privado en relación de dependencia”. Hay empresarios que advierten del riesgo de juicios si no se paga. El ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, aseguró ayer que “esta semana saldrá el decreto que instrumenta el bono”
ticipadas, entre octubre y diciembre”, indicó De Diego.
“Hay empresas que se encaminan a un concurso”, dijo el titular de la Cámara de la Construcción, Gustavo Weiss. “En nuestro rubro, las obras se hacen o se paran. No existe trabajar a media marcha. Y la tendencia lamentablemente es ésa, cada vez más empresas con procedimientos de crisis”, explicó a PERFIL.
Uno de los rubros donde abundan las suspensiones es el automotor. Ahí, según los datos de Smata, el gremio del sector, ya hay 7 mil suspensiones, pero se pueden “multiplicar por dos o tres si esto sigue así”, según dijo su y ratificó que será “no remunerativo de hasta $ 5 mil pagado en dos veces”. Consultado por el pedido de algunos sectores industriales de que esa suma sea considerada a cuenta de futuros aumentos salariales, el funcionario dijo en declaraciones radiales que “eso va a depender de cada una de las negociaciones que se lleven adelante”.
Tras acordarse el bono, la CGT desactivó la amenaza de convocar a un paro de actividades en la última semana de noviembre, cuando se haga la cumbre de presidentes del G20.
titular, Ricardo Pignanelli.
Esta semana, en una reunión de empresarios del sector en el marco de Automechanika, se señaló que la gran mayoría de los autopartistas están complicados por la caída de actividad y los insumos dolarizados. Smata aplica cada trimestre la inflación del trimestre vencido y hoy tememos por la sustentabilidad de ese sistema, más la carga impositiva brutal”, señaló Pablo Plesko, de Magna Seating.
“Los autopartistas adentro del convenio tienen un sistema de suspensiones, entonces pueden desafectar al personal sin demasiado trámite”, explicó De Diego.n
“Aunque se lo haga aparecer como reducción
de jornada, es una suspensión”