Una asamblea femenina tomó el Teatro Cervantes
En la obra La asamblea de
las mujeres, Aristófanes usa la comedia para plantear lo que en el siglo IV antes de Cristo solo podía ser ficción especulativa: que las mujeres decidieran sobre los asuntos de la polis, es decir, sobre los asuntos públicos. Y fue incluso más lejos: las imaginó tomando decisiones muy diferentes de las de los hombres, radicalmente orientadas hacia el bien común. Para lograrlo, sus protagonistas se vestían de varones.
Un sábado de marzo casi 2.500 años más tarde –y para dar comienzo oficial a su temporada 2019, además– en pleno centro porteño, el Teatro Nacional Cervantes vivió un día abarrotado de esas mismas mujeres que reflexionaron sobre los distintos aspectos de qué significa serlo aquí y hoy.
Desde temprano hubo largas colas para ingresar, y el desafío se convirtió en elegir qué ver y qué escuchar. A las tres de la tarde le llegó el turno a la antropóloga feminista Rita Segato. La sala María Guerrero se quedó con gente afuera para escucharla disertar sobre las largas luchas de las mujeres, los feminismos y los activismos genéricos. Además, hubo llenos en las conferencias de escritoras y de filósofas como Diana Maffía, Defensora de Género de PERFIL. También hubo música y performances.
Las mujeres –y los hombres que las acompañaron– se repartían los pañuelos verdes –que no faltaron– y los programas de mano diseñados por Martín Gorrincho, el mismo creativo que dio vuelta la imagen del único teatro nacional del país. “Buscamos acercar el acceso a una ciudadanía y una vida plenas, con igualdad de derechos, libertad, autonomía, voz y voto”, dijeron las curadoras del encuentro, Marcela Basch, Carla Imbrogno y Amalia Sanz.