LA TRAVESÍA DESDE EL REALISMO HASTA EL ABSTRACTO
TALLER ABIERTO, NOS PERMITE ENTRAR POR UNOS SEGUNDOS EN LA INTIMIDAD DE LOS ESPACIOS DE TRABAJO, DONDE LOS CREATIVOS MATERIALIZAN UNA PARTE DE ELLOS MISMOS. UNA MIRADA ÍNTIMA SOBRE LA ARTISTA, QUE NOS ABRIÓ LAS PUERTAS DE SU ESPACIO DE TRABAJO
Qué te inspiró a dedicarte al arte plástico? ¿Cómo definirías tu estilo? El ARTE llegó a mi vida para quedarse en un momento donde necesité llenar espacios. Fue así que a mis 40 años comencé con un taller donde aprendí a utilizar el óleo y mi espíritu perfeccionista me llevó de lo figurativo al realismo y al hiperrealismo más tarde necesité desestructurarme, y entre horas de práctica y diferentes maestros pasé por el impresionismo hasta llegar al arte abstracto. Hoy mi estilo es una mezcla de lo aprendido, con técnicas y materiales mixtos, me gusta pintar niños, flores, animales… con colores vivos, buscando que el espectador se emocione con cada obra.
¿Qué significa para vos tu espacio de trabajo?
Para mi, el espacio donde trabajo representa un lugar mágico donde todo se transforma, desde el lienzo hasta mi alma. En ese lugar disfrutó de trabajar y es donde soy yo en todas mis expresiones para transmitir lo mejor de mi. No es solo un lugar físico, ahí trasciende el tiempo, porque cuando me pongo a pintar me transporto y el tiempo pasa por completo.
¿Qué técnicas y materiales utilizas para crear tus obras?
Hoy mi técnica es mixta, me gusta lo figurativo con fondos abstractos, o de repente utilizar diferentes materiales para enriquecer o resaltar parte de la obra como telas, papeles, cartones, elementos oxidados, entre otros. A la hora de elegir los materiales me gusta fluir entre las pinturas y combinar óleos, acrílicos, tintas, barnices y pintura asfáltica.
¿Qué proyectos tenés actualmente en marcha y qué objetivos te propones para el futuro?
Desde el 2015 estoy dando clases en mi taller “Colores Santos”, en una hermosa casona donde fui invitada por una fundación, compartiendo experiencias con gente apasionada por su trabajo, tanto como lo soy yo con el mio. Por otro lado, pinto cada día, siempre con una serie diferente donde cada una tiene tantas obras como las que sean necesarias para contar lo quiero transmitir y al final de cada una las presento en una muestra individual. Mis muestras las hago recorrer por museos y galerías de diferentes ciudades siendo mi mayor satisfacción el reconocimiento del espectador. Me gusta el ida y vuelta que la gente tiene con mi obra, eso me parece muy nutritivo.