Acusan a una familia de simular golpes de piratas del asfalto
Tenían una flota de camiones. Se sospecha que arreglaban con los choferes para que les entregaran la carga que después vendían. Actuaban en siete provincias.
Esta es la historia de un clan. Un clan de simuladores. Una familia de camioneros que tenía una flota de vehículos de gran porte que utilizaban para desviar cargamentos que robaban en distintas partes del país. Los investigadores detectaron casos en siete provincias y sospechan que serían los responsables de más de 300 hechos de piratería del asfalto.
La organización era liderada por un tucumano de 61 años apodado “El Tonje”, quien trabajaba con cuatro de sus hijos, de entre 21 y 39 años. Contaban con una lo- gística que sorprendió a los detectives: desde camiones con acoplados hasta galpones para acopiar las cargas robadas. Y se movían en coches de lujo, como camionetas marca BMW y Toyota.
La banda fue desarticulada después de una investigación de un año realizada por la Unidad Especial de Inteligencia Buenos Aires Sur de Gendarmería Nacional, que depende del Ministerio de Seguridad de la Nación. La pesquisa incluyó entrecruzamientos de llamados, análisis de perfiles de redes sociales, y cotejo de remitos y facturas, entre otras cosas.
El cabecilla fue identificado por las fuentes como Ramón Benigno Q. Lo detuvieron en su casa de dos plantas de la localidad cordobesa de Jesús María.
“Es asombroso el plan que cumple la sociedad delictiva, y el rol específico que cada uno de ellos tiene asignado, Gendarmería secuestró siete camiones y tres autos, y allanó la casa del líder. conformando un engranaje aceitado que posibilita que los objetivos sean cumplidos con éxito, intentando no levantar sospechas al referir una presunta sustracción por piratas del asfalto, siendo en realidad el delito cometido por las personas contratadas para el transporte de la mercadería”, explica el fiscal Facundo Flores en un escrito, a la hora de imputar a los acusados por asociación ilícita.
Según fuentes judiciales, Juan Manuel Q. (31), alias “Comadreja”, sería el encargado de coordinar los golpes con los choferes a los que supuestamente contrataba para que entreguen la mercadería.
Los otros tres hijos de “El Tonje”, Oscar (37), Ramón (39) y Manuel (21), están acusados de ser los que comercializaban el botín.
“Manuel Q. es quien gestiona, por directivas de su hermano Juan Manuel, con los dadores de carga, a la vez que también, junto a Juan Manuel, es quien capta a los camioneros infieles para que entreguen la mercadería, algunos de los cuales (Juan M., Leonardo R., Pedro L.), lo realizan de forma habitual, por lo que son parte de la organización”, agregó el fiscal en la imputación.
Para los investigadores la maniobra es tan grande que llevará varios meses cerrar el círculo de sospechosos.
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Parte de la organización fue desarticulada durante una serie de operativos realizados en Jesús María, Colonia Caroya y Villa Retiro (Córdoba).
En total fueron detenidos seis sospechosos, entre ellos el líder y sus cuatro hijos.
En base a las pruebas reunidas la Justicia solicitó la captura de tres choferes que trabajaban para la familia investigada.
Según los investigadores es incalculable el valor de la estafa a las empresas de logística y transporte.