Mamás adictas: hay un mayor consumo de drogas durante el embarazo
Los médicos dicen que se registran más casos. Alcohol, marihuana y cocaína, las sustancias más utilizadas. en Córdoba ya es ley testear a todos los recién nacidos.
Tiemblan incesablemente, rechazan la comida y lloran sin parar. Muchos de ellos llegan al mundo antes de tiempo o bajos de peso. Algunos convulsionan o sufren síndrome de abstinencia. Los bebés expuestos a las drogas dentro del vientre materno son un fenómeno cada vez más frecuente, según relatan los médicos que trabajan en hospitales públicos.
Aunque el alcohol sigue encabezando el ranking de las sustancias más utilizadas, ya no es raro encontrarse con casos de embarazadas que consumen cocaína, marihuana o éxtasis. El problema es tal que, por ejemplo, la semana pasada la Legislatura de Córdoba aprobó una ley para que se realicen de manera obligatoria análisis para detectar metabolitos de cocaína y de marihuana en el meconio (primer excremento) del recién
nacido con el fin de “proteger la salud del bebé”.
“El consumo de drogas durante el embarazo es un tema que nos preocupa desde hace muchos años porque va en ascenso. El problema es que hoy en día se hace muy difícil saber qué droga consumió la madre. Por ejemplo, las pastillas en las fiestas electrónicas. Nosotros debemos indagar qué es lo que está consumiendo y en base a eso orientar”, le explicó a PERFIL Eduardo Valenti, director del Hospital Materno Infantil Ramón Sardá, donde se asisten más de seis mil partos al año.
“No sólo vemos casos de embarazadas que consumen, sino también muchos casos de mujeres que por un consumo de sustancias se les desencadena el parto y terminan ella y el chiquito internados. Los bebés suelen terminar dando positivo a la droga que la mamá consumía porque la sustancia atraviesa la placenta”, sostu- vo Carlos Damin, jefe de Toxicología del Hospital Fernández. “Lo que más vemos es cocaína, cocaína fumable, marihuana y alcohol. En algunos casos, hemos v i s to o pi o i d e s ”, agregó. Aunque no hay estadísticas oficiales, algunos estudios exploratorios realizados por la Facultad de Ciencias Bioquímicas y Farmacéuticas de la Universidad Nacional de Rosario en parturientas donde hay sospecha de consumo hallaron cifras elevadas: un 43,4% de las muestras dio positivo para cocaína y un 12,5% para marihuana (ver recuadro). Daños. Los efectos de las drogas sobre el bebé son específicos para cada tipo de sustancia y diferentes si ocurren en el primero, segundo o tercer trimestre del embarazo. “En el primer trimestre hay mucho más riesgo de que una sustancia sea teratogénica, que genere malformaciones y en el resto que sean fetotóxicas, que genere toxicidad en el feto”, explicó Damin.
Para Ana Girardelli, directora del hospital zonal Reencuentro, especializado en adicciones, si una mujer consume durante todo el embarazo, cuando llega el momento del parto pueden darse dos situaciones: que el chico nazca con una intoxicación aguda; o, según el tipo de droga, que el chico sufra después un síndrome de abstinencia.
“Una situación que estamos viendo y que, lamentablemente, se está haciendo frecuente son pacientes que nacen con abstinencia a la cocaína. La mamá seguramente ha tenido un embarazo complicado. Sin embargo, no se hace el diagnóstico hasta que se produce el parto. La abstinencia se trata de forma sintomática. Pero cuando uno investiga, muchos de esos bebés tienen un ACV que cursaron intraútero o alteraciones neurológicas”, relató.
Según la experta, debería pedirse un dosaje de drogas
“en el hospital estamos viendo bebés que nacen con abstinencia a la cocaína.”