Políticos fuera de serie
La primera mención importante de una serie en el ámbito político de la que tenemos registro estuvo a cargo de Jorge Telerman el 23 de mayo de 2007 en medio del debate con el hoy presidente de la Nación. “Macri se equivoca; él ve 24 y cree que eso es la realidad”, dijo. Un chiste tan fuerte que logró hacer pasar desapercibido el único desliz del ex presidente de Boca durante toda la contienda; una alusión poco clara sobre un registro de ADN para los violadores. Hoy son moneda corriente desde Cristina Kirchner que citaba Games of Thrones, pasando por Máximo con El patrón del mal hasta Aníbal Fernández que, cuando tuvo que elegir una escena de House of Cards, señaló en la que Frank Underwood asesina a Zoe Barnes haciéndolo pasar por un suicidio. Una vez más comprobamos que lo más importante que nos enseña oratoria es aprender a callar a tiempo. Estas ficciones pueden ser usadas para mostrarles a los candidatos determinadas acciones y sus consecuencias a través de determinadas escenas; las que más utilizo son Wag the Dog y El negociador; pero nunca jamás para copiar o imitar. Por otro lado, en manos de improvisados, constituyen un riesgo enorme como cuando nos topamos con alguien que por ver Lie tome asume que sabe interpretar lenguaje no verbal. Es como creer que uno aprende medicina por mirar Dr. House. Especialista en comunicación política.