El vice de ee.UU. tranquilizó a los aliados europeos
Mike Pence reafirmó que la Alianza Atlántica es “fundamental” para Estados Unidos, pero insistió en que es necesario “repartir las cargas” de su financiación.
El vicepresidente norteamericano, Mike Pence, aseguró ayer que los Estados Unidos siguen siendo los más “firmes aliados” de Europa y reafirmó que continuarán “pidiéndole cuentas” a Rusia, pero adelantó que los socios de la OTAN deberán cumplir con su promesa y repartir más los costos de la Alianza Atlántica.
“Hoy en nombre del presidente Trump, les traigo esta garantía. Estados Unidos respalda firmemente a la OTAN y cumplirá de forma inquebrantable sus compromisos con la alianza transatlántica”, dijo Pence en su esperado mensaje ante la Conferencia de Seguridad en Múnich.
Entre los asistentes estaban la canciller alemana, Angela Merkel, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, y el de la alianza militar OTAN, Jens Stoltenberg, además de decenas de ministros, jefes de Estado y de Gobierno que llegaron a Múnich esperando obtener la respuesta a una pregunta fundamental: ¿Qué quiere Trump?
Pence fue aún más fervoroso: “Esta es la promesa del presidente Trump: estaremos junto a Europa, hoy y cada día, porque estamos unidos por los mismos ideales nobles: libertad, democracia, justicia y el Estado de derecho (...) Confíen en que Estados Unidos fue y será siempre su mayor aliado”.
La del vicepresidente fue otra llamada a la calma ante la nueva política exterior norteamericana, que ha desorientado a sus aliados. Poco antes, el secretario de Defensa, Jim Mattis, había afirmado que la OTAN era “fundamental” para Estados Unidos y el secretario de Estado, Rex Tillerson había relativizado la voluntad de acercamiento de Washing- ton con Moscú en una reunión del G20.
Pence también abordó brevemente la relación entre Washington y Moscú, sobre todo para tranquilizar a los europeos. “Sepan que Estados Unidos seguirá pidiendo cuentas a Rusia, incluso si buscamos un terreno de entendimiento. El presidente Trump piensa que es posible”, aseguró. Repartir las cargas. Más allá de reafirmar la alianza con los países de la Alianza Atlántica, Pence reafirmó la exigencia de Trump de que los costos de la OTAN deben ser mejor repartidos. “La defensa europea reclama nuestro compromiso tanto como el de ustedes, pero la promesa de repartir la carga hace mucho que no se cumple”.
En una cumbre realizada en Gales, en 2014, los países europeos se comprometieron a aumentar hasta 2024 el gasto de defensa hasta un 2% del producto interior bruto. “El presidente Trump espera de sus aliados que cumplan con su palabra en materia de gastos militares” agregó Pence.
La principal destinataria del mensaje fue la canciller alemana, Angela Merkel. Alemania tiene la economía más fuerte de Europa, pero destina 1,2% de su producto interior bruto a la defensa.
Merkel re spond ió de forma paradójica. “Nos sentimos comprometidos con este objetivo”, señaló la mandataria germana. Pero al mismo tiempo aclaró que el presupuesto de defensa de su país no puede crecer más de un 8% al año, con lo que no podrá llegar a la meta en 2024.