El señor del baño
Un mapa es, en su sentido más estricto, la utopía de la representación. Poner en escala un territorio, sus accidentes y sus límites. Confiar en que eso es posible. Uno muy grande es el de Qiu Zhijie. Es un artista chino que nació en 1969 y muchos de sus trabajos están pensando el vínculo entre la fotografía y el video. Para la Bienal de San Pablo de 2014 realizó esta cartografía que, de alguna manera, sigue una pequeña tradición de sus antepasados en las bienales: Song Dong y su mapamundi de caramelos y Ai Wei Wei trazando la cartografía de China con materiales diversos. Para este caso, Zhijie saca a relucir su habilidad de calígrafo en Map, un inmenso mural sobre la pared que pretende abarcar el todo, como un absoluto.
Ciudades reales e inventadas, genealogías de auto- res e ideas, religiones, recursos humanos y naturales se despliegan en una imaginación desbordante. Su ubicación, al comienzo de la muestra, puede ser leída como un plano. Menos para encontrar respuestas que para perderse entre las preguntas. Un punto sobresaliente en su carrera fue la instalación Public Life/Glass Toilet, una serie de baños públicos realizados en vidrio que, además de dejar ver qué pasa en ese espacio privado e intentar una reflexión sobre las condiciones de producción de una obra, en el sentido más literal como derivado posible, reenvía y resignifica el capítulo inicial de la historia del arte contemporáneo: el ready made de Marcel Duchamp y su famosa Fuente. Lo escatológico es, siempre, razón de ser de un final, pulsión de muerte y excremento.
Buscar entre los desechos, entonces, las inflexiones del arte contemporáneo.