REGRESO AL CINE
Esta entrevista se realizó antes del despido de Alejandro Cacetta del Incaa, que luego generó la furibunda reacción de Campanella, quien en Twitter manifestó: “No hay UNA persona en la industria del cine, NI UNA, que tenga dudas sobre la honestidad de Alejandro Cacetta. Horrible y torpe opereta”. En tal sentido, la charla tomó derroteros más amables, si se quiere. —¿Cómo viene tu nueva película? —Estoy trabajando con Eduardo Sacheri en un guión de largometraje, con la intención de filmar el año que viene. No puedo adelantar nada sobre cómo va la historia. Espero filmar en enero y febrero del año que viene y estrenar en agosto. —¿Hay algo que te gustaría hacer en el cine que sospechás que nunca vas a hacer? —Un musical. Siempre pensé que los directores que no son coreógrafos no sé muy bien qué hacen en los musicales. —¿Cómo creés que será en concreto la reacción frente a la situación global por parte de las diferentes artes? —El arte empieza a ser una condensación y a la vez la devuelve a la sociedad, y ahí quizá se concretice eso que ya tenía flotando en el inconsciente colectivo. El arte de su tiempo es el que mejor representa a su sociedad, no el que la guía. No podemos juntarnos los directores y ver qué hacemos. Los relatos nuevos van a aparecer. —¿Cómo creés que reaccionarías si tenés que vivir en una situación similar a la de los personajes de Colony, bajo un régimen dictatorial? —Uno no sabe cómo reaccionaría en una situación límite. ¿Qué me pasaría si esa dictadura contra la que lucho mató a alguien que quiero? Si el deseo de venganza se mezcla con el de justicia, entonces ahí las cosas se complican.