PASEO DEL BAJO

el sector más vulnerable de la población, sin que esa tendencia pueda ser frenada con la hipócrita advertencia que por ley debe ser incluida en la publicidad gráfica y televisiva. Por eso, el simple hecho de que el hallazgo de esos científicos (¿tal vez investigadores del Conicet?) pueda ser celebrado con un gran titular alarma intensamente: se está intoxicando a los chicos que representan el futuro de la Argentina. Eugenia M. de Saks ssaks@fibertel.com.ar En la página 47 del domingo 23 se anuncia la iniciación de los trabajos correspondientes a las obras del Paseo del Bajo, de importante magnitud, que posibilitará la fluida conexión vehicular norte-sur a cargo de la empresa AUSA. Esta firma tuvo a su cargo las conexiones del encuentro sobre San Juan y 9 de Julio, donde como producto de las deficiencias de diseño (según la opinión de los especialistas que analizaron el caso), en varias oportunidades los camiones que la transitaban perdieron sus cargas, motivo por el cual hubo que agregar cercas de protección para evitar daños a quienes circulaban debajo. Además, ejecutó en la misma ubicación los túneles para el Metrobus, en los que recientemente debió suspenderse la circulación para efectuar reparaciones. Es de esperar que dadas la cantidad y la calidad de las obras que ya ejecutaron, hayan tomado los recaudos y previsiones necesarias para que un trabajo de esta importancia y magnitud –cuyo presupuesto y plazo de ejecución se desconoce– no adolezca de los inconvenientes señalados, sobre todo teniendo en cuenta que serán realizados en terrenos de relleno ganados al río. Cabe agregar que, de Los hechos y los dichos merecen respeto y credibilidad según su origen. La señora Margarita Barrientos, refiriéndose al Presidente, dijo con su habitual humildad pero con convicción que no es cierto que Macri gobierna para los ricos. Y agregó que la gente no ve las obras increíbles que están haciendo a lo largo del país. Ella afirma que le constan. No sé cuántas afirmaciones obrarán mejor a favor de nuestro presidente por la autenticidad de quien fue su autora. Lila Díaz D’Onofrio verdadyamor@fibertel. com.ar