“MI AMBICION ES SIEMPRE SER MEJOR”
A.S.
Aún no tiene fecha, pero Miguel Angel Solá espera el estreno de El último
traje, de Pablo Solarz, con Angela Molina. “Allí encarno a un sastre judío de 90 años, sobreviviente del Holocausto, basado en una historia real”, anticipa. “Soy antiguo y anacrónico, nací en otro siglo. Siempre creí que trabajando y estudiando una persona se dignificaba y eso lo transmitía a las generaciones siguientes. La ambición debe pasar por el conocimiento, por ser piadoso con la otra persona, por ver la felicidad de que esté mejor tu entorno. Tengo la ambición de ser cada día mejor actor. Este mundo es muy difícil para los hombres, no para los machos, por lo cual uno se imagina las dificultades que enfrentan las mujeres. Es cierto que por cada mujer hay muchos hombres cobrando el doble por el mismo puesto. Y en otras partes del mundo ellas no pueden ni trabajar ni estudiar. “Hacemos salidas cada tanto con Paula –recuerda–. Vimos el ballet del Sodre… es maravilloso lo que hizo Julio Bocca… se merece un monumento. Aquí hay mucho ladrón y asesino de lesa humanidad en todos los sentidos, engañadores. No se puede creer que el destino de Argentina sea el que hoy es. La responsabilidad es nuestra. Aceptamos y toleramos que los cretinos nos aniquilen, con la capacidad intelectual que hay. No es sólo el voto, es la voluntad. Hoy sienten y esa misma gente lucha contra el mismo deterioro que le provocan por falta de piedad ajena”.