Trump a Xi Jinping: “Hay que hacer algo con corea del norte”
El presidente norteamericano, Donald Trump, aprovechó su viaje a Europa para tener diversos encuentros con otros mandatarios. Además de la entrevista con Putin, ayer estuvo con el líder chino Xi Jinping. Del encuentro, surgió un mensaje claro.: “hay que hacer algo” con Corea del Norte, al margen de la cumbre del G20. Programa nuclear. El programa nuclear de Pyongyang constituye un problema significativo y “hay que hacer algo” para solucionarlo, declaró al comienzo de una reunión con Xi, constató un periodista de la AFP. Está claro que, para el presidente de los Estados Unidos, los últimos ensayos misilísticos de la potencia comunista constituyen una amenaza y una tentación para el enfoque que desea para la política internacional de su país. La crisis sobre el problema nuclear norcoreano se acentuó con el reciente disparo de un misil balístico intercontinental (ICBM) que se estrelló en el mar de Japón. Presión necesaria. La dependencia económica de Corea del Norte de China es amplia. Gran parte de sus insumos industriales, de los alimentos y los productos que llegan a ese país, bastante aislado de la comunidad internacional, son de origen chino. Por eso, Donald Trump considera que la potencia oriental tiene un rol clave en la pacificación de la región.
Estados Unidos culpa a China de no ejercer suficiente presión sobre Corea del Norte, especialmente porque Pekín continúa siendo el principal socio comercial de Pyongyang. A su vez, el gobierno de China considera que la estrategia norteamericana no es la más eficaz a la hora de conseguir avances en Corea.
Sin embargo, el presidente de EEUU, Donald Trump, agradeció hoy al presidente chino, Xi Jinping, “las cosas que ha hecho” ante el “problema sustancial” que supone Corea del Norte, “un problema ante al que hay que hacer algo”. Con Japón. La agenda de Trump referida a la cuestión de los misiles fue más amplia. Incluyó reuniones con otros líderes de oriente que también estuvieron presentes en Ha mburgo durante los últimos días de la semana anterior. Antes de este encuentro Trump se había reunido con el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, con quien coincidió en la relevancia del “problema y la amenaza” que supone el régimen de Pyonyang. Por su parte, Abe agradeció a Trump la reunión que mantuvieron los dos junto al presidente surcoreano, Moon Jae-in, el jueves, antes de comenzar la cumbre del G20, para abordar una amenaza cada vez más grave que exige “demostrar una alianza fuerte”.
En este sentido, la nueva política exterior norteamericana puso como uno de sus objetivos primordiales conseguiir frenar el avance militarista de las posiciones del gobierno de Corea del Norte: un escenario que sigue abierto y amenazante.