DE VIDO I

He escuchado que algunos periodistas me mencionan junto a otros como antecedente de la posible expulsión de De Vido. Yo no fui expulsado, sino suspendido por 45 días. El Senado había dado media sanción a una ley que le daba al correo privado para Yabrán “servicios monetarios secretos” y yo hice un dictamen en contra. Yo había hecho pública mi posición de votar en contra. Un país que no tiene secreto bancario no puede darle al correo privado “servicios monetarios secretos”. Me opuse en todos los programas que había en la época. Un Sr. Ongaro, socio de Gustavo Juliá, me denunció porque un colaborador mío le quiso vender unos bonos de cien pesos para una cena en la que lanzaría mi candidatura a senador. Hoy Juliá está preso en España, lo pillaron con 944 kilos de cocaína. Era obvio para qué querían los servicios monetarios secretos. El fiscal que me acusó era Paulo Starc, hijo del brigadier Luis Starc, socio fundador de OCA con Yabrán. Escribí un libro sobre esto: El dinero de las drogas, que está en las librerías. La Justicia me sobreseyó. No tengo causa ni procesamiento alguno. Sólo quiero que los periodistas desinformados dejen de mentir. El problema de la corrupción no es que haya un corrupto, el problema es cuando la mayoría son corruptos y la gente honesta les tiene miedo a los corruptos. Eso pasó en 1995. Eduardo Varela-Cid eduardo@e-libro.com