Arribas: se complica la entrega de las pruebas
El jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas, sigue de suerte. Las transferencias bancarias realizadas por el cuevero brasileño Leonardo Meirelles estaban listas para ser enviadas a la Argentina. Así lo habían confirmado las autoridades de Brasil en junio. Pero en las últimas semanas, los planetas volvieron a chocar. Brasil confirmó que enviará la documentación donde constan las trasferencias que Meirelles habría realizado a funcionartios o intermediarios argentinos sólo en el caso en que la Justicia argentina y la Cancillería firmen un acuerdo comprometiéndose a garantizar la inmunidad de Meirelles y de los 78 ejecutivos de Odebrecht que declararon como arrepentidos en Brasil. El texto exige garantizar inmunidad penal, civil y administrativa. Para la Justicia argentina, firmar ese acuerdo es imcompatible con la legislación local, confirmaron fuentes del caso a PERFIL.
Hasta ahora, Arribas es el único argentino involucrado en las transferencias, pero los fiscales brasileños –por pedido de sus pares argentinos– habían solicitado al cuevero que identificara todas las operaciones bancarias que realizó vinculadas a la Argentina. Eso incluye las transferencias a Arribas, pero podría implicar otros movimientos financieros dirigidos a más argentinos. Son prueba de quién pagó los sobornos a funcionarios públicos y quiénes operaron como intermediarios de esos sobornos.
Meirelles dijo que transfería coimas de Odebrecht y OAS.
La causa contra Arribas está cerrada. Ningún juez quiso avanzar en la investigación. Ahora resta saber si la Cámara de Casación permite a los fiscales llegar a la Corte Suprema.
Meirelles es uno de los doleiros, operadores financieros, que transfirieron millones de dólares en coimas por orden de estas empresas. Fue uno de los primeros confesores del caso en su país y declaró por videoconferencia en mayo frente a los fiscales Federico Delgado y Sergio Rodríguez, titular de la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA).