Mellizos reunidos en un festejo irrepetible
El malba organizó una “convención” para celebrar a la reconocida fotógrafa Diane arbus, cuya icónica imagen de dos gemelas se exhibe actualmente. Duplas de hermanos y hermanas cuentan vivencias.
Siempre interesada por retratar el mundo de lo excéntrico y lo extravagante, en la década del 60 la fotógrafa norteamericana Diane Arbus asistió a un festejo navideño un tanto particular, donde todos los asistentes eran mellizos y trillizos. Allí fue que captó una de sus fotos más icónicas: “Gemelas idénticas”, la imagen de dos nenas vestidas iguales, en la misma pose, pero con una expresión distinta; marcando la individualidad de cada una.
Ayer, en el marco de los festejos por el 16º aniversario del Malba, la foto de Arbus –cuya muestra se exhibe en el museo– fue el eje central de la convención de mellizos/as y gemelos/as que el museo organizó, a modo de homenaje. Intrigadas y divertidos por la convocatoria, casi cien “duplas” se acercaron.
Muchas, incluso, lo hicieron vestidas iguales, como el caso de Marisa y Carina Kohen, que se pusieron el mismo vestido floreado y el mismo collar, además de usar el pelo de la misma manera. “Es la primera vez que participamos de un evento así, nos pareció divertida la idea”, cuentan mientras se mezclan entre otras mellizas como ellas, entre anécdotas. “Cuando nacimos, a mi papá le costaba mucho identificarnos, así que nos pintaban la uña del pie a una de las dos. Hoy nos siguen confundiendo mucho”, cuenta divertida Marisa. “A nosotras de chicas nos ponían un pañuelo en la cabeza a cada una, una usaba el color negro y otra el blanco. Era la única forma de diferenciarnos porque nos vestían igual. Eramos las figuritas repetidas del colegio”, recuerdan las gemelas Sandra y Analía Wochel. “A nosotras nunca nos gustó vestirnos igual, de hecho nos resultaba horrible”, agregan María Elena y María de los Angeles Sánchez.
Durante el encuentro, además, se exhibió el documental La ciudad de las réplicas, de Belina Zavadisca, una pe-
lícula sobre Famaillá, una localidad tucumana donde se festeja el Día Nacional del Mellizo (ver aparte).
Experiencias. ¿Sos vos o tu hermana? ¿Sienten lo mismo? ¿Cómo es mirarse frente a un espejo? Para cualquier par de gemelos o mellizos esas preguntas seguramente fueron un clásico de su infancia. “Una amiga me contó que cuando le preguntaban qué se sentía al ser gemela, ella respondía: ¿y vos qué sentís de ser solo? Me gustó eso, porque demuestra lo paradójico que es indagar lo natural para el otro. Para los gemelos la relación, buena o mala, es de hermanos, sólo que de tu misma edad. La sensación de extrañeza te la ofrece el otro”, cuenta Natalia Rosli.
En su caso, con Jimena, su gemela, fueron al mismo curso en el colegio, por lo que tenían el mismo grupo de amigos. Rockeras las dos, nunca se vistieron igual ni les gustaba que les preguntaran en qué se parecían o no. “De chicas éramos como cualquier hermano, con peleas y momentos unidas. Nuestra relación mejoró cuando cada una estudió algo diferente, formó grupos de amigos propios y se fue a vivir a un lugar distinto. Aún más cuando me separé de mi marido, ahí nos volvimos a elegir, ya como compañeras más que hermanas”, agrega.
“Para mí, ser mellizo es haber nacido con mi mejor amigo al lado. Somos muy distintos, pero nos complementamos como ninguno”, cuenta Pablo Blanco, sobre su vínculo con Emilio; que es, además, papá de mellizas. “Me acuerdo de que el primer día de jardín hicimos un escándalo para que no nos separen en las salitas. La primaria la hicimos separados, pero compartimos grupo de amigos. Y al final del secundario fuimos juntos. Ahí hacíamos trabajos juntos y firmábamos Blancox2”, recuerda. “Apenas me enteré de que iban a ser dos, nos sorprendimos. Después, las dudas. Pero después caí en la cuenta de que iban a tener la suerte de crecer con una amiga, como yo”, dice Emilio. Ayer, festejaron el cumpleaños de las mellizas.
Producción: Fernando Maldonado
Somos muy distintos, pero para mí ser mellizo es haber nacido con mi mejor amigo. PABLO & EMILIO BLANCO
La sensación de extrañeza la trae el otro, para los mellizos o gemelos no es extraño. NATALIA & JIMENA ROSLI