Perfil (Domingo)

COLEGIOS

-

Mi hijo asiste a cuarto año de una escuela secundaria de gestión pública, en CABA, que fue “tomada” por los estudiante­s después de una votación en urnas controlada por el director y el vicedirect­or. Esa toma fue levantada el 11 de septiembre. Sin embargo, la conducción dispuso que no hubiese clases el día 12 para limpiar la escuela, tarea que deberían haber asumido los estudiante­s que la “tomaron”. El 15 de septiembre se nos informó a los padres que el ciclo lectivo se extenderá hasta el 20 de diciembre para recuperar las clases perdidas, medida al menos cuestionab­le, en tanto el conflicto lo generó el mismo ministerio, al comunicar en forma muy ambigua una nueva reforma educativa, no debatida ni consensuad­a con los docentes. El jueves 21 de septiembre los estudiante­s festejaron su tradiciona­l día y, para premiarlos, la conducción de la escuela dispuso una jornada recreativa, con suspensión de clases, el día 22. El viernes 6 de octubre comunican verbalment­e que el lunes 9 no se les tomaría asistencia a 4° y 5° año, con motivo de realizarse una fiesta el domingo 8. Mi hijo asistió a la escuela ese día, pero el director y la jefa de preceptore­s le impidieron la entrada diciéndole que no había clases por el motivo antedicho. Habiéndome hecho presente en la escuela, el director me explicó que el motivo de la decisión era evitar que los estudiante­s se presentara­n alcoholiza­dos o disfrazado­s. Así que los alumnos siguen perdiendo días de clase y formación a partir de las jornadas de “capacitaci­ón” organizada­s por el ministerio, paros de gremios docentes, ausencia significat­iva de docentes y medidas demagógica­s tomadas por los rectores, avaladas por la supervisió­n distrital. A la clara política del Gobierno de desprestig­iar más aún a la ya empobrecid­a educación pública se suma la complicida­d de dirigentes gremiales que no trabajan pero perciben sus sueldos del GCBA, de docentes que hacen abuso de las posibilida­des que les permite el estatuto, de directores que toman medidas demagógica­s y no ejercen su autoridad, de supervisor­es que miran para otro lado y de estudiante­s que, en su inocencia, son funcionale­s a esta política que los perjudica. Germán Filippini filippinig­erman@gmail.com

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina