Sin leyes específicas
La ex diputada Marcela Rodríguez fue la única que presentó un proyecto sobre acoso sexual que nunca se llegó a aproba r. Por lo que hoy, el acoso sexual entra en la categoría de acoso laboral que incluye además de la violencia psicológica y la física y está bajo la órbita del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social que cuenta con una Oficina de Asesoramiento sobre Violencia Laboral (OAVL) que atiende a todos aquellos que son víctimas de algún tipo de violencia en ese ámbito.
En total, entre llamados y comunicaciones por mail con la Oficina, y contactos con el Centro de Orientación al Ciudadano por esta temática, se contabilizaron 6.377 denuncias por violencia la- de la Mujer. No obstante, apenas unos años atrás esto hubiese sido impensado. Las especialistas coinciden en que la sociedad cambió y eso es lo que permite este fenómeno. “Hoy hay conciencia de que esto es violencia y de que no se puede tolerar porque se sabe es un camino ascendente que puede ser muy grave”, afirma Bianco. Lozano, en tanto, hace hincapié en “los movimientos culturales y las gestaciones de ideas como procesos que allanaron el camino”. El colectivo NiunaMenos es una de sus mayores expresiones. Florencia Alcaraz, una de sus fundadoras, explica su rol: “La marcha de 2015 influyó mucho. La presencia masiva de mujeres, travestis, lesbianas y trans en la calle tuvo un mensaje muy poderoso: el no estamos solas. Creo que de ahí surge una atmósfera de potencia feminista que hace que estemos más seguras al momento de denunciar y contar”. Aunque hace una salvedad: que el Estado aún no dio una respuesta a la altura de esa demanda. El silencio no es salud. El temor a la posible pérdida del trabajo, a ser c señaladas como culpables eran los motivos por los cuales no se decía. “Los agresores les hacen creer que son las responsables de lo que les pasa. A eso, se le suma la vergüenza”, explica Bianco. A lo que Florencia subraya: “Antes no se veía el boral entre el mes de enero y septiembre de este año.
De ellas, un 70% fueron realizadas por mujeres, y unos 450 casos fueron por acoso sexual. Una persona que sufre algún tipo de violencia laboral puede comunicarse con la Oficina de Asesoramiento sobre Violencia Laboral (OAVL) a través del 0800-6664100.
“No es una cacería. el acento está puesto en respaldar a las víctimas” (lozano).