The Economist
Se suponía que Facebook, Twitter y Google salvarían la política, ya que la buena información eliminaba los prejuicios y la falsedad. Sin embargo, lejos de traer la iluminación, las redes sociales han estado difundiendo veneno y está a la vista que algo salió mal. En estos días es necesario preguntarse: ¿las redes sociales amenazan la democracia?
Lado oscuro de las redes