ULTIMA
Nací en agosto de 1938; no había cumplido 5 años cuando una revolución militar, el 4 de junio de 1943, derrocó al presidente Ramón S. Castillo. Si la revolución de 1930 terminó con setenta años –desde Bartolomé Mitre a Hipólito Yrigoyen– de progreso económico social, insertados en el mundo, donde éramos el octavo país en importancia, la de 1943 inició un proceso de militarismo, populismo y decadencia en todos los niveles que sufrimos hasta ahora. Próximo a cumplir 80 años, tengo el íntimo sentimiento de que estoy viviendo mi última oportunidad de ser ciudadano de una Argentina con futuro. Estoy esperanzado en que dejemos para siempre el facilismo, la ventaja, el atajo, la impunidad, la corrupción y las malas acciones, que nos postergaron por más de siete décadas como nación y sociedad, y comencemos a transitar un camino de verdadera justicia social y progreso sostenido para todos los argentinos. Alberto Martín maquibetomartin@hotmail. com