Los Monos: US$ 2 millones en abogados
Los miembros de la organización son asesorados por un equipo de nueve abogados. a muchos de ellos les pidieron dedicación exclusiva.
La banda narco de Rosario contrató a un ejército de defensores para enfrentar el juicio.
La narcobanda rosarina Los Monos llegó a recaudar entre 300 y 500 mil pesos diarios por el negocio de la cocaína. Con un ejército de soldaditos diseminados en distintos búnkeres de la ciudad y una estructura en pleno crecimiento, la familia Cantero llegó a evaluar la posibilidad de construir una bóveda refrigerada para evitar que los billetes que acumulaban se les pudrieran. Estaban atravesando uno de los mejores momentos. Y no sabían qué hacer con semejante caudal de dinero.
El poder económico de esta organización es clave porque sirve para entender cómo tendieron redes en las fuerzas de seguridad y la Justicia con el objetivo de garantizarse la impunidad y el control absoluto del negocio. Con cuentas embargadas y millones de pesos y dólares en bienes incautados en los últimos cuatro años, Los Monos no sólo no están en quiebra sino que invertirán unos 2 millones de dólares para costear su defensa.
En los pasillos de los tribunales es un secreto a voces el dinero que pagarán los principales miembros de la organización para que sus defensores puedan dedicarse exclusivamente a su defensa y no distraerse con otras causas.
En el juicio que se inició esta semana contra 25 imputados (12 narcos y 13 policías), los presuntos miembros de la organización son defendidos por nueve abogados particulares. Carlos Varela, Adrián Martínez, Fausto Yrure y Carlos Edwards están a cargo de las defensas de los principales cabecillas: Ariel y “Guille” Cantero, “Monchi” Machuca, Lorena Verdún (viuda de Clau- dio “Pájaro” Cantero, el líder acribillado en mayo de 2013), Silvana Gorosito (mujer de Machuca), Leandro Vilches, Emanuel Chamorro, Agustín Ruiz y Francisco Lapiana (ex representante del futbolista Angel Correa, actualmente en el Atlético Madrid ). En el caso de Verdún, imputada por “asociación ilícita y encubrimiento”, otras dos abogadas intervienen en su defensa: Romina Bedetti y María Varela. En total, cuenta con seis letrados.
Marcelo Martorano está a cargo de la defensa de Walter Jure, Juan Ubiedo asiste también a Gorosito, y Marcelo Piercecchi asesora a Mariano Salomón, señalado como uno de los lavadores de la banda.
De los 25 imputados sólo cuatro pidieron asistencia oficial: los ex policías Germán Herrera, Eduardo Enríquez y Diego Cárdenas; y el ex prefecto Roberto Otaduy, que cuentan con el asesoramiento de Florencia Chaumet.
Los otros nueve ex miembros de las fuerzas de Seguridad (Angel Avaca, Cristian Floiger, Omar Lescano, Juan Ángel Delmastro, Sergio Blanche, Waldemar Gómez, Juan José Raffo, Gustavo Pereyra y Guillermo Cardini) contrataron abogados particulares: Sergio Larrubia, Alberto Tortajada, Gabriel Navas, Mónica López, Víctor Corbalén y Evelyn Quain, Rodrigo Mazzuchini, Sanmanulia y Gonzalo Rucci.
En total son veinte los abogados defensores que intervienen en el debate. Si bien todos pedirán la nulidad de la investigación por la supuesta parcialidad del juez instructor Juan Carlos Vienna (amigo del padre de Martín “Fantasma” Paz, un narco asesinado por Los Monos, cuya muerte desató una guerra a sangre y fuego en Rosario que tiempo después derivó en el homicidio del “Pájaro”), no actuarán en bloque porque en algunos casos existe un conflicto de intereses.
“Dentro de todo es un trabajo independiente, con cambios de opinión sobre diversas cuestiones. Algunos abogados hacemos la defensa de varios imputados con la cual a veces hay comunión de opinión, pero no hay reuniones para definir estrategias”, asegura a PERFIL el abogado Fausto Yrure.
El principal objetivo que tienen los abogados de Los Monos no pasa por bajar la expectativa de pena sino conseguir que sus clientes recuperen la
libertad dando vuelta la acusación. “Lo que entendemos es que existió una asociación ilícita real, compuesta por un juez y un grupo de policías de la división judiciales, investigando a una presunta asociación ilícita”, explica Carlos Varela, que tiene entre sus defendidos a los Cantero, los más pesados de todos.