SOLIDARIDAD
Cuando veo por televisión las imágenes del gigantesco operativo militar en busca del submarino ARA San Juan, que involucra a las máximas potencias armamentistas de Occidente, siento el mismo cosquilleo de emoción que me invade cuando revivo, cada tanto, esa multitudinaria evocación popular independentista dentro de un escenario (“vuela, pensamiento, en alas doradas”) de la imperecedera Nabucco. Es que el accidente ha puesto imprevistamente en escena la obra más inimaginable de acción conjunta entre países que están enfrentados por cuestiones geopolíticas y que a raíz del infortunio sufrido por nuestro submarino acudieron prestamente en su auxilio. Como no quisiera entrar en la polémica (los argentinos nos hemos vuelto extremadamente escépticos), que tiene más que ver con la “conveniencia”, la “publicidad de su armamento” o simplemente determinar “quién la tiene más larga”, sólo puedo afirmar, sin temor a equivocarme, que este operativo internacional es la ofrenda solidaria más maravillosa que el mundo le ha tributado a nuestro país, independientemente del resultado final al que se llegue. Es esperable que seremos merecedores de semejante respaldo mundial. Otto Schmucler oschmucler@gmail.com