Cristina y Dilma, juntas en recoleta
Cristina Kirchner recibió ayer en su casa de Recoleta a la ex presidenta de Brasil Dilma Rousseff, y charló con ella sobre la “persecución judicial” que hay en varios países para “ocultar la realidad económica”. “Utilizan el aparato judicial para destruir la política”, explicó la ex presidenta argentina al relatar el encuentro en la red social Twitter. “Se llama Lawfare: usan el aparato judicial como arma para destruir la política y a los líderes opositores”, dijo. Esa arma “tiene una pata en los medios de comunicación”, advirtió Cristina Kirchner. “El objetivo es el mismo acá y en Brasil: ocultar el desastre económico que están llevando a cabo los gobiernos neoliberales en la región”, precisó. Dilma fue destituida por un juicio político, en el marco de una causa por “maquillaje” de las cuentas públicas. Y a CFK el juez Bonadio le pidió el desafuero y la detención por el pacto con Irán. Rousseff y Kirchner lo atribuyen a una maniobra política y judicial.