La agenda de género se suma a las cumbres internacionales
El capítulo argentino del G20 tiene a cargo la dirección del grupo de mujeres, el W20, que se lanzará mañana en Buenos Aires. El miércoles representará el ingreso de la Argentina a la red de exportadoras de la OMC. Es la primera vez que hay un foco específico de género en una reunión ministerial del organismo.
Las agendas no escapan a los grandes temas: la baja participación de mujeres en el ámbito laboral, la brecha salarial –del 17% en la región latinoamericana según un informe de la consultora Mercer de esta semana–, la baja representación femenina en los directorios y la necesidad de compartir el trabajo en casa y contar con esquemas más flexibles que permitan compatibilizar familia y trabajo.
En el caso del W20, el capítulo local es dirigido por dos empresarias: Susana Balbo y Andrea Grobocopatel. El puntapié inicial será el lunes, con la presencia de la vicepresidenta Gabriela Michetti, la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y también las contrapartes alemanas, que venían llevando adelante la agenda hasta ahora. Presencias. Para definir los ejes de trabajo también participarán la directora regional de ONU Mujeres, Lara Blanco, la directora de protección social del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Igualdad y el Crecimiento (Cippec) –que trabajó en propuestas para proyectos de tiempo de cuidado que superan los cambios propuestos en la reforma laboral– y representantes de entidades como el BID.
El miércoles, además, se lanza SheTrades Argentina, un proyecto para que las mujeres participen en las exportacio- nes impulsado por la Agencia de Inversiones, el Centro de Comercio Internacional (ITC) y el Ministerio de Producción.
“La plataforma trabaja en siete áreas que son claves: las políticas comerciales, el acceso al financiamiento, el acceso de la mujer a las compras públicas, el acceso a las cadenas de valor y de producción, la mejora de calidad de productos y servicios”, explica Arancha González, directora ejecutiva del ITC que comparten la OMC y ONU.
El segundo objetivo es poner a la s emprendedo - ras en contacto con una red de mujeres que compran y venden para compartir espacios y contactos. “Queremos trabaja r las políticas pero también la internaciona l i zación”, deta l la G onzález. El foco en género de la ministerial del organismo comercial es algo que los organizadores le atribu- yen a la gestión de la ex canciller Susana Malcorra.
“De cada cinco empresas que exportan, sólo una es de una mujer. En cambio, en el comer- cio digital, de cada cinco empresas, cuatro están dirigidas por mujeres”, detalló González, por lo que el grupo intenta empujar la agenda en e-commerce.