Perfil (Domingo)

Se anticipa el conflicto docente con el recorte de poder a Ctera

El Ministerio de educación convocará en los primeros días de febrero a los gremios. no plantea discutir todavía el salario.

- EZEQUIEL SPILLMAN

La primera semana de febrero volverá a ser clave en la disputa entre el gobierno nacional y los sindicatos docentes. Es que para esa fecha el Ministerio de Educación que conduce Alejandro Finocchiar­o tiene previsto convocar a la nueva mesa docente conformada por cuatro gremios que tendrán la misma representa­ción.

Será un nuevo round de la pelea, luego de un decreto ministeria­l que supuso la disolución de la anterior mesa docente en la que Ctera, el gremio más grande y cuya cara visible es Roberto Baradel, tenía una plena mayoría de 5 sobre 9 miembros.

Tras el decreto, el sindicato puso el grito en el cielo e intentó, con suerte dispar, que el resto los apoye. Sin embargo, cuando Sonia Alesso, titular de la central, intentó convocar a CEA, Amet (escuelas técnicas) y UDA (Unión de Docentes Argentinos) no tuvo eco. Es que con la nueva mesa –de la que fue separado Sadop, de docentes privados, por no tener un vínculo de empleador con el Estado– los otros tres gremios aumentaban ostensible­mente su representa­ción (al 25% cada uno). Esta situación generó roces internos en el Frente Nacional Docente ya que, tras un acuerdo alcanzado en los años en que Daniel Filmus era ministro, Ctera

Educación volverá a convocar a los gremios docentes para la primera semana de febrero.

Discutirá sobre la carrera docente y la formación, pero el temario no incluirá el debate salarial.

Será otro round entre Ctera y el Gobierno ya que debutará la nueva mesa con tres sindicatos cercanos a la CGT.

El macrismo no piensa dar el brazo a torcer y pretende bajar la representa­ción del gremio de Baradel en la discusión paritaria. se quedó con una mayoría que nunca estuvo legitimada bajo una resolución, según explican en el Gobierno.

De todas maneras, el manto argumental era que, dada la cantidad de afiliados, el gremio de Baradel debía tener la mayoría. Sin embargo, tampoco hubo compulsa de afiliados que acrediten los porcentaje­s, adelantan en el macrismo.

Ahora, la nueva convocator­ia, que aún no fue oficializa­da, tendrá que ver con la discusión sobre la carrera docente y la formación, pero no se tocará el tema más urticante: el salario docente. Por estos días en el mundo gremial hay dudas sobre la presencia de Ctera en esa mesa de negociació­n convocada por el gobierno nacional. Estrategia. En este marco, en el Ministerio de Educación mantienen su postura: no habrá paritaria nacional docente, como sí hubo en 2016. Al igual que el año pasado, en el Gobierno aseguran que son las provincias las que deben negociar sus salarios con sus docentes. Solo quedará ratificada un acta que firmó en 2016 el entonces ministro Esteban Bullrich por la cual ningún docente puede cobrar menos que el salario mínimo vital y móvil más un 20%. El acta firmada puede ser refrendada sin problemas ya que no pone un límite a la medida. “Cuando Cristina Kirchner dejó el Gobierno el salario mínimo docente quedó por debajo del vital y móvil, entonces para los docentes no fue tan existosa esta paritaria. Cambiemos lo igualó, primero, en enero por una medida de Esteban Bullrich. Y luego quedó fijado en un 20% por encima”, explicaron en Educación.

Hoy Baradel y sus aliados están solicitand­o la reapertura de la paritaria nacional docente y el cambio en la mesa que rearmó el Gobierno. La pelea promete tener otros capítulos.

Por lo pronto, si en febrero Ctera se sentara, habría una ratificaci­ón implícita de la medida. Por el otro lado, si la silla quedara vacía pero UDA, Amet y CEA estuvieran allí, dejarían a ese gremio docente en una situación de clara debilidad.

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