Solo 6,6% de los jóvenes encontró salida laboral tras participar del plan de empleo
En medio de la discusión sobre la reforma laboral, el empleo joven es una de las aristas que surgen como prioritarias al momento del debate. De acuerdo con datos oficiales del Ministerio de Trabajo, solo el 6,6% de los jóvenes de entre 18 y 24 años que en diciembre finalizaron el plan Jóvenes con Más y Mejor Trabajo lograron insertarse en el mercado laboral formal.
El programa, iniciado en 2009 durante la primera presidencia de Cristina Kirchner y continuado en su gestión por Mauricio Macri, culminó en diciembre de 2017 con un total de 101.916 beneficiados, 40.500 casos más que los registrados en diciembre de 2016, lo que fue evaluado como un dato positivo por la cartera que comanda Jorge Triaca, quien esta semana regresa de sus vacaciones tras el escándalo con su empleada doméstica.
A través de la red de más de 600 oficinas de empleo en todo el país, se ofrecen 1.050 pesos por mes y un curso introducto- En 2017, hubo 102 mil beneficiados, más que en 2016 pero menos que en el mejor año K. rio sobre el mundo laboral, que se complementa con la posibilidad de finalizar los estudios, aprender un oficio y certificar las competencias laborales, con una duración de entre 6 y 18 meses. Una vez finalizado, surgen opciones como el Progra- ma de Inserción Laboral, que da incentivos a empresas para que tomen a estos jóvenes, o el Programa Empalme, creado como reemplazo de los planes sociales y que apunta a reducir el 17% de desempleo que existe en la franja entre 18 y 30 años.
Pero el análisis de los datos muestra que la cifra macrista es menos de la mitad de lo que registró el kirchnerismo en 2011, cuando en el apogeo del plan contó con 229.633 beneficiados (con un 14,5% de inserción), aunque ese número fue en disminución hasta 2016, cuando retomó el curso ascendente. Precisamente, fue ese año –el primero bajo la gestión de Cambiemos– en el que reconocen algunas falencias.
Para la financiación de 425 millones de dólares se acudió a un préstamo del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), que requiere una evaluación semestral de la Auditoría General de la Nación (AGN). En el último análisis publicado, correspondiente al segundo semestre de 2016, se verifica que no fue cumplida la meta de evaluación de los jóvenes luego del proceso de formación, requerida para la confirmación del préstamo. En ese ítem, solo fue evaluado el 2,62% de la muestra de 12.500 personas estipulada por la AGN y también se advierte que solo cuarenta oficinas de empleo – de las noventa que debían respaldar el proyecto– cumplieron con los objetivos proyectados. No obstante, durante 2017 se logró revertir la tendencia y ya se confirmó la renovación del préstamo, informaron fuentes del ministerio a PERFIL.
La reforma laboral, que ya comenzó a discutirse con sindicatos y empresarios, contempla algunos cambios destinados a insertar a jóvenes a través del retorno de las pasantías, aunque mueven el foco de alerta hacia la precarización que castiga a esta franja etaria.