Un referéndum define si Correa, enfrentado al actual presidente, podrá ser candidato.
Los ecuatorianos acuden hoy a las urnas para decidir si prohíben la reelección indefinida. El presidente apoya el Sí y su antecesor el No.
El amor se terminó hace un buen rato, pero los papeles del divorcio los firmarán recién hoy, cuando 13 millones de ecuatorianos acudan a las urnas a votar en la crucial consulta popular. El presidente Lenín Moreno y su antecesor Rafael Correa, dos ex aliados convertidos en enemigos acérrimos, se enfrentan en una batalla decisiva que marcará cuál será el futuro político de Ecuador. ¿Regresará el ex mandatario al poder o su sucesor lo sacará de la cancha? Esa es la cuestión que indicará quién saldrá mejor parado del reparto de bienes.
El referendo, convocado por Moreno, incluye siete preguntas diversas, que consultan a la ciudadanía sobre la inhabilitación a cargos electivos de sentenciados por corrupción, la imprescriptibilidad de abusos sexuales a menores, el cuidado del medio ambiente y la remoción del órgano de control estatal. Pero el objetivo central del gobierno ecuatoriano es modificar el artículo de la Constitución, reformada en 2015 por Correa, que permite la reelección indefinida. Si los ecuatorianos dan su consentimiento para suprimirlo, el ex presidente no podría regresar al Palacio de Carondelet.
Cor rea siempre insinuó que optaría nuevamente por la presidencia. “Si la oposición nos quiere volver al viejo país de la ingobernabilidad, del chantaje, del sometimiento, ahí nos veremos nuevamente en las urnas. El terror de que vuelva Correa –dijo en 2015 hablando de sí mismo en tercera persona– va a hacer que se porten algo bien, algo decentemente”. Pero ahora esa chance corre riesgo de desvanecerse, con la controvertida Pregunta Nº 2 de la consulta, que propone “que todas las autoridades de elección popular puedan ser reelectas por una sola vez para el mismo cargo”.
“El tema central es el de la reelección, que definirá la posibilidad o no de que Correa pueda volver a participar en elecciones. Este es un momento donde se institucionaliza una transición que comenzó cuando Moreno ganó las elecciones y Correa se distanció de él”, explicó a PERFIL Adrían Bonilla, profesor de Flacso Ecuador.
Según Correa, la consulta
“El tema central es saber si correa puede volver a candidatearse a la presidencia o no.”
popular es inconstitucional, ya que la enmienda a la Carta Magna debería ser discutida en la Asamblea Nacional. Además, cuestiona la aplicación retroactiva de esa enmienda, que apuntaría a impedir una nueva postulación suya. Otra de las fuertes críticas del ex presidente apunta contra la Pregunta Nº 3, que busca reestructurar el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, que designa a las autoridades de la Contraloría General del Estado –máximo