Findes ‘low-cost’: el Sur ya compite en precio con Mar del plata
Las nuevas rutas a la Patagonia ofrecen precios más económicos que los micros, y casi igualan los gastos de irse a la playa desde la Ciudad.
Con la llegada de las aerolíneas
low-cost al país, las nuevas rutas y la posibilidad de acceder a destinos a precios a veces hasta más económicos que en transporte terrestre, las provincias del Sur se entusiasman y ya proyectan que la conectividad los posicione como una alternativa turística para los fines de semana largos.
“Por el tema de la distancia no somos un destino fuerte de fin de semana largo, básicamente porque los grandes centros emisores de turistas de las grandes ciudades están lejos”, dice Gastón Burlon, secretario de Turismo de Bariloche, donde la llegada de los vuelos de bajo costo creen podrá cambiar el panorama en el corto plazo: “la conectividad es esencial. Y habiendo vuelos económicos de grandes centros emisores estamos convencidos que nos podemos convertir en opción de destino de fin de semana largo, porque la gente puede venir gastando lo mismo que antes gastaba en ir a la costa, o incluso para quienes antes no lo hacían porque acceder a un aéreo era muy caro”, agrega.
Para el feriado de Carnaval, esperan una ocupación similar a la que tuvieron en enero, que ronde el 75%. A Bariloche ya llegaron dos vuelos de Flybondi, uno desde Córdoba y otro desde Mendoza. El primero desde Buenos Aires será a fines de este mes, cuando salga desde el aeropuerto de El Palomar, desde donde operará la compañía. Solo a esa ciudad, la empresa proyecta una frecuencia de siete vuelos diarios, con una tarifa por tramo que arranca en los $ 1.200. El mismo tramo en micro de larga distancia –con veinte horas de viaje desde Retiro–, no se consigue por menos de $ 1.700.
Ida y vuelta en avión a Bariloche costaría así solo 600 pesos más que irse a la costa,
por ejemplo, donde el pasaje en avión ronda los mil pesos y los calculos de nafta y peajes en ruta alcanzan los $ 1.500 aproximadamente.
Es porque, de hecho, que desde sectores turísticos advierten que el modelo low- cost no viene, en realidad, a competir por los pasajeros de otras líneas aéreas, sino que la competencia será principalmente la del transporte terrestre (ver aparte).
Desde la Secretaría de Turismo de Neuquén, también sostienen que la expectativa de convertirse en opción de fin de semana largo también está, sobre todo en destinos como Villa la Angostura, San Martín de los Andes, Villa Pehuenia, Termas de Copahue, donde lo fuerte siempre es el trabajo en temporada.
“En los primeros vuelos desde Córdoba hubo mucha gente que fue a Bariloche por tres días, así que claramente va a pasar que la gente los elija como destino de fin de semana. Lo mismo una vez que empecemos a volar a El Calafate, Ushuaia; y en Neuquén, donde además hay un mercado que llamamos de visitas familiares. También tenemos un vuelo desde Mendoza a Bariloche, y hoy los turistas pueden ir a Mendoza directo a Bariloche, sin volver a Buenos Aires”, aporta Julian Cook, CEO de Flybondi. Solo en las primeras 24 horas, la empresa vendió 10 mil pasajes, para 16 de las 43 rutas de cabotaje que le autorizó operar el gobierno nacional. A futuro buscarán tener también una base en el Sur, ya sea en Bariloche o en Neuquén. La segunda aerolínea
low- cost que comenzará a operar a mediados de año, Norwegian, tendrá 72 rutas de cabotaje, entre las que están Bariloche, El Calafate, Ushuaia, Mendoza; varios de éstos sin conexión en Buenos Aires.
Con el objetivo de conectar la región patagónica, aunque no se trate de una aerolínea con modelo low-cost, en abril también comenzará a operar Lasa. “Vamos a cubrir todo el Sur, somos patagónicos, así que entendemos la necesidad de conexión a nivel regional. Y por eso no vamos a Buenos Aires. Somos la primera aerolínea que no opera Aeroparque”, dice su CEO, Juan Silenzi. Algunas de sus rutas son Mar del Plata, Santa Rosa, Neuquén, Bariloche, Chapelco, Bahía Blanca, Esquel, Trelew, El Calafate, entre otras.