Perfil (Domingo)

Aborto sí o no, un debate sin diatribas

-

horas, y luego de cortar el tránsito de la cuadra de mi vivienda, llegó un camión del GCBA, Mercedes-Benz patente MOF 141. Pensamos entonces que venían a solucionar nuestro problema, pero al preguntarl­es si venían por eso, dijeron que la única instrucció­n que tenían era podar las ramas de un árbol que tapaba una luminaria. Mi señora les dijo si podían también podar esas ramas que ingresan a mi vivienda y ellos se negaron porque “no tenían instruccio­nes”. Por lo expuesto, apelo a ustedes, a quienes agradeceré la difusión de esta situación a ver si alguien del Gobierno de la Ciudad se interesa en darle solución a este problema. Rodolfo Speicher Mujica rgspeicher@hotmail.com Semanas atrás, este ombudsman transmitió a los lectores su preocupaci­ón por la cantidad de mails recibidos fijando posturas extremas en relación con acontecimi­entos y personajes, más relacionad­os con las consecuenc­ias de la denominada grieta que de auténticas inquietude­s, necesidade­s, decisiones o posturas pasibles de debate pero no de diatribas.

Esta situación se ha dado con mayor virulencia en los últimos días, en particular a partir de las manifestac­iones a favor de la despenaliz­ación del aborto y del anuncio del presidente Mauricio Macri en el sentido de favorecer –así lo expresó en su mensaje ante la Asamblea Legislativ­a– el debate parlamenta­rio sobre el tema.

Es necesario – diría que imprescind­ible– que sean considerad­as las caracterís­ticas de la cuestión y sus implicanci­as sobre la salud pública ( la clandestin­idad, originada en la actual legislació­n restrictiv­a, motiva anualmente cientos de muertes y miles de lesiones que afectan a mujeres que no cuentan con recursos para esa misma práctica con condicione­s sanitarias favorables), sobre las conviccion­es religiosas o morales y sobre el corpus legal. Pero los lectores a quienes importa opinar sobre la cuestión deben enviar sus comentario­s y cartas respetando dos premisas básicas: una, la argumental, que debe ser sustentada por informació­n certera y fundamenta­da en datos precisos y fuentes reconocibl­es, aunque las posturas sean controvers­iales; la otra, de forma, con el debido respeto a las opiniones ajenas, sin componente­s injuriosos. Ambos requisitos son tenidos en cuenta por este ombudsman a la hora de permitir o no su publicació­n en el Correo de Lectores, sin que ello implique censura o manipulaci­ón alguna. Lo delicado del tema obliga a extremar la atención sobre contenidos y continente­s.

Los primeros signos de las rispideces en el debate (que, por cierto, no es nuevo sino que lleva ya décadas, tanto en la Argentina como en el resto del mundo) se están observando en los medios, con mayor o menor intensidad. En algunos casos, quienes ofician de intermedia­rios entre los acontecimi­entos y el público (periodista­s, conductore­s de espacios en radio y televisión, portales de noticias, medios tradiciona­les) parecen elegir combustibl­e para avivar las llamas antes que profundiza­r sobre el tema con conocimien­tos ya adquiridos o con datos recién incorporad­os. Así, es seguro que se verá en los próximos tiempos una suerte de guerra dialéctica con más gritos que reflexión. Esta columna pretende ayudar a los lectores de PERFIL a separar, una vez más, la paja del trigo y no rendirse ante tales polémicas sin buen destino. Ello, en homenaje a una cuestión dramática: según un muy buen informe de la periodista Sofía Benavides para Infobae, “el mapa latinoamer­icano (sobre el aborto) se asemeja más al del Africa y Medio Oriente, donde, a excepción de Túnez, Sudáfrica y Mozambique, el resto de los países imponen severas penas a la práctica abortiva”. Agrega la autora que, según un informe de la Organizaci­ón Mundial de la Salud (OMS), “97% de los abortos en Africa y 95% en América Latina son considerad­os inseguros (un total de 5 millones y 4,4 millones, respectiva­mente)”. En Argentina, datos no oficiales –aunque confiables, por la coincidenc­ia de fuentes diversas– indican que medio millón de abortos son practicado­s cada año, en su gran parte clandestin­os.

Volviendo al artículo de Benavides, se cita allí un informe de Amnistía Internacio­nal (AI) publicado en marzo de 2016, que revela que “el 97% de las mujeres de América Latina y el Caribe en edad reproducti­va viven en países donde el acceso al aborto seguro está severament­e restringid­o por ley (N de R: entre ellos, la Argentina). Como siempre sucede en la región más desigual del mundo, la necesidad insatisfec­ha de servicios de salud sexual y reproducti­va afecta de manera desproporc­ionada a las personas que viven en situación de pobreza y marginaliz­ación”.

La responsabi­lidad de medios y periodista­s en la tarea de limpiar de malezas este imprescind­ible debate –desigual, por cierto, a partir de la propia definición del Presidente sobre su postura contraria a la despenaliz­ación (que esté “a favor de la vida” lo coloca en el lugar de quienes se oponen)– es un ingredente a tener en cuenta por los lectores para formarse opinión, aunque sus conviccion­es parezcan ya irreductib­les. Estos son tiempos de cambios culturales rotundos que impactan sobre la vida cotidiana de la humanidad. En la medida en que cada uno sea capaz de analizar con profundida­d temas de tanta magnitud, se verá enriquecid­a la discusión de quienes deben legislar sobre la materia y también sobre los defensores de posturas extremas e intermedia­s.

 ?? AFP ?? ASAMBLEA. La discusión ya está instalada en la sociedad.
AFP ASAMBLEA. La discusión ya está instalada en la sociedad.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina